ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
El negocio cambió, el monopolio de facto sigue
Google ya «no es» Google. En 2015 fundó Alphabet, la gran multinacional de la nube. En los términos y condiciones, el contenido y los datos de los usuarios, así como sus interacciones, se convirtieron en la parte central de su negocio desde entonces. La nube es, digamos, el
«big data» y Google posee un 98% del mercado de accesos, aparece instalado por defecto en móviles de todo el mundo y mantiene, por ello, un monopolio de hecho. Cabe señalar que pocas cosas producen más interacciones que las noticias de los medios de prensa.
Esta evolución reciente de la potencialidad económica que genera la actividad de miles de millones de usuarios en la web ha dotado de una nueva dimensión económica al gigante, que planea operar u opera en biotecnología, banca, etc. Y que puede, gracias al control de los datos y los flujos de interacción, predecir comportamientos humanos, filiaciones...
Cabe preguntarse por qué esa irritabilidad frente a la regulación del derecho de autor en la prensa. Podría tener que ver, aseguran algunos expertos consultados, con la opacidad casi total sobre los tránsitos de sus usuarios. «Viven de la información que analizan y no parecen proclives a compartir esos datos, o ningún dato. El derecho de propiedad intelectual sobre su algoritmo, sus estrategias y esa bolsa de datos mundial no se comparte».