Las entidades reunidas en Adepi apoyan a la prensa contra Google

Derechos de autor

Las entidades de gestión de derechos de autor reunidas en Adepi, que incluyen las de los artistas visuales, cineastas, músicos, escritores y otras disciplinas, han mostrado su apoyo a la Asociación de Medios Independientes (AMI) en su pugna por conseguir que la Directiva Europea de Mercado Único Digital sea transpuesta en España de manera íntegra, con el fin de que los agregadores de noticias y plataformas –Google es el más importante– paguen una compensación por el uso de las noticias que generan los medios, que se gestione colectivamente y sea irrenunciable.

En concreto Vegap, la entidad de los artistas visuales, se mostró ayer favorable a que se reconozca que los editores y autores «sean justamente remunerados por quienes se enriquecen con este trabajo creativo y ponen en peligro tanto la actividad creadora, como la libertad de prensa, al pretender eludir esta justa remuneración». «El ejercicio de este derecho es irrenunciable y para garantizar su cumplimiento en la transposición de esta Directiva al Derecho español es necesario que se regule su irrenunciabilidad y se establezca la gestión colectiva obligatoria de este derecho para proteger a los titulares del mismo de las presiones de los grandes conglomerados empresariales de las industrias tecnológicas», señalaba Vegap.

Francia pide más a Google

En Francia, donde se ha permitido la gestión individual mediante acuerdos confidenciales, la ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, pidió ayer a Google que no se limite al primer acuerdo alcanzado con la Alianza de la prensa de información general, que representa sólo a una parte de los diarios franceses. El acuerdo permitirá a los periódicos cobrar una remuneración todavía desconocida que no satisface a toda la prensa nacional.

Google ha negociado a varias bandas, con el fin, parcialmente conseguido, de dividir a la prensa, sin respetar de manera clara y definitiva la Directiva 2006 / 116 / CE de la UE, «relativa al plazo de protección del derecho de autor y determinados derechos afines». En Francia, Google comenzó por negociar acuerdos individuales con algunos diarios, como «Le Figaro», «Le Monde», «Liberation», entre otros. La negociación individual y confidencial permitía a Google estar en situación de fuerza dominante, siempre. El pago no sería en concepto de derecho de autor y por tanto excluye a los periodistas.