ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Cs sale en defensa de los hosteleros y denuncia la aplicación del QR
Hostelería
Ciudadanos considera que el diseño e implantación de la aplicación informática del código QR como medida de control para reducir los contagios en los establecimientos hosteleros es «la historia de una chapuza». Así lo señaló ayer el diputado naranja David Muñoz Zapata, que ha visitado algunas cafeterías y restaurantes de Toledo para comprobar de primera mano el malestar del sector con esta iniciativa «fallida» de la Junta.
Muñoz Zapata apuntó que « el Gobierno de GarcíaPage ha hecho las cosas deprisa y corriendo para hacer propaganda, en lugar de tomar decisiones sensatas y llevarlas a cabo de manera eficaz para resolver problemas».
En este sentido, indicó que ya el día de su lanzamiento, hace exactamente una semana, Ciudadanos alertó sobre las deficiencias de la aplicación, demostrando que tenía importantes defectos de funcionamiento, pues permitía a los usuarios registrarse introduciendo datos falsos.
«La puesta en funcionamiento de esta medida es la demostración de cómo no hay que hacer las cosas», manifestó Muñoz Zapata, recordando que «los hosteleros se han puesto en pie de guerra contra el Gobierno de Castilla-La Mancha, y con toda la razón, pues se trata de una chapuza informática y también de una chapuza legal».
Page y el autobombo
La formación naranja, que en las últimas semanas ha mantenido contactos con numerosos profesionales y entidades del sector de la hostelería, ha reprochado a García-Page que haya «buscado el autobombo y la propaganda a costa de los hosteleros, sin contar para nada con ellos, y perjudicando a unos autónomos y pequeños empresarios que ya bastante mal lo están pasando como para, encima, tener que aguantar estas chapuzas».
El partido ha registrado en las Cortes regionales una batería de preguntas al Gobierno regional «para que dé todas las explicaciones pertinentes» en torno a «una aplicación cuyo contenido y lanzamiento vuelve a demostrar que el Gobierno de García-Page pone mucho más empeño en su propaganda partidista que en el interés general».