ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Es necesario blindar al fiscal del poder político
Se nos presenta una oportunidad única para reponer la confianza en la institución y despejar esas sombras de duda sobre la imparcialidad de quien vela por la legalidad. Hay que dotar a la Fiscalía de una verdadera independencia
de todos los miembros de la carrera; fijar los requisitos de mérito, capacidad y especialización; definiendo las categorías y funciones correspondientes. En definitiva, reorganizar y reestructurar la carrera fiscal de manera racional, eficiente e integrada entre las diferentes figuras coexistentes.
Tenemos un gran reto por delante: el de dotar al fiscal de las herramientas estatutarias adecuadas para hacerlo fuerte frente a cualquier atisbo indeseado de injerencia política a fin de que pueda desempeñar su trabajo como fiscal investigador, ofreciendo a la ciudadanía un servicio público de justicia de calidad y transmitiendo a la sociedad la imagen de imparcialidad que nos corresponde.
Sin duda los fiscales en España estamos plenamente preparados para asumir la investigación penal por nuestra formación jurídica y especialización, por nuestra versatilidad, el modelo de trabajo en equipo, así como, por el conocimiento integral del procedimiento penal, como demostramos a diario y, por supuesto, por nuestro compromiso con el fiscal constitucional alejado de aquél de 1870 al que no queremos que se nos regrese.