ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Los recursos obtenidos en 2019 superaron los 42 millones de euros
Según los datos aportados el mes de noviembre del año pasado con motivo del Día de la Iglesia Diocesana, la Archidiócesis de Toledo cuenta con 548 sacerdotes y 271 parroquias. Hay 1.062 religiosas y religiosos y 520 monjas y monjes de clausura en 37 monasterios. En las parroquias colaboran 2.405 catequistas. Además, tiene 184 misioneros y misioneras.
En lo que se refiere a la actividad celebrativa, en 2019 se administraron 3.987 bautizos, 4.856 primeras comuniones, 3.521 confirmaciones y 1.163 matrimonios. Por otro lado, la Archidiócesis de Toledo cuenta con 130 centros para mitigar la pobreza, en los que se han atendido a más de 25.000 personas. Pero también existen 3 centros de menores y jóvenes para la tutela de la infancia, otros 3 centros para la promoción de la mujer y víctimas de la violencia, 6 consultorios familiares, 15 guarderías infantiles y 16 casas para ancianos, enfermos crónicos y personas con discapacidad, en las que se atienden a 1.068 personas.
«Se trata de una gran labor que contribuye a hacer una sociedad mejor. Es cierto que hay muchas instituciones y muchas personas ayudando a los demás, pero, en ese sentido, la Iglesia ha sido pionera y referencia social apoyada en multitud de personas voluntarias que, desde la fe, ayudan a los demás en diversos ámbitos. Ciertamente, sin la Iglesia nuestra sociedad tendría más carencias aún».
«De forma transparente, y desde hace años, nuestra archidiócesis viene ofreciendo su información económica. Estos datos reflejan la realidad económica del global de la archidiócesis, es decir, del arzobispado con todas sus delegaciones, de los organismos diocesanos, de los arciprestazgos y de las parroquias. Son los datos del ejercicio 2019».
En cuanto a los ingresos, los recursos obtenidos durante el año 2019 ascendieron a algo más de 42 millones de euros, que proceden de las aportaciones voluntarias de los fieles (7.849.741,77 euros), la asignación tributaria (5.839.605,94 euros), los ingresos de patrimonio y otras actividades (13.123.419,88 euros), y los ingresos corrientes y de instituciones diocesanas (8.708.071,85 euros). Estas cantidades junto con otros ingresos extraordinarios suman 42.233.694,97 euros. «Es una cifra que muestra cómo los miembros de nuestras parroquias reconocen y valoran la labor de la Iglesia y su implicación en el sostenimiento económico».
La aplicación de los recursos ha supuesto unos gastos cercanos a los 42,5 millones de euros, que se reparten en: actividades pastorales y asistenciales (9.253.706,47 euros), retribución del clero (6.585.723,21 euros), retribución del personal seglar (3.171.965,49), aportaciones a los centros de formación (2.051.315,45), conservación de edificios y gastos de funcionamiento (14.190.824,57 euros) y gastos extraordinarios como nuevas construcciones y programas de rehabilitación de edificios (7.241.740,74 euros). El importe total de los gastos suma 42.495.275,93 euros.