ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Los servicios de extinción tienen el control del incendio de Seseña
Los bomberos alternarán el agua y la espuma para bajar la temperatura
El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas del Gobierno de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, confirmó ayer a mediodía que el incendio que se originó el pasado martes por la tarde en el polígono industrial de Seseña, y que ha afectado a cuatro naves y más de 52.000 metros cuadrados, ya estaba controlado.
Ruiz Molina explicó que, según la evolución, se alternará el uso de agua o espuma, con el objetivo de bajar la temperatura de la zona afectada. A primera hora de la mañana se utilizó agua, pero se generó un intenso humo en la A-4, y el objetivo era no tener que cortarla.
Asimismo, el consejero señaló que el nivel de calidad del aire era «normal» en la zona de Getafe e Illescas. Sin embargo, dependiendo del informe que el Gobierno regional recibió por la tarde sobre la evolución de la situación, se tomaron medidas preventivas.
Los bomberos de la provincia de Toledo y de la Comunidad de Madrid dieron por controlado el incendio a mediodía, aunque el fuego estará totalmente apagado en unos días, informó a Ep un portavoz de Emergencias Comunidad de Madrid 112.
Tras la reunión mantenida entre ambos cuerpos, decidieron dejar en la zona cuatro unidades de Toledo y dos de Madrid, básicamente en apoyo del suministro de agua. El incendio no estaba controlado pero sí confinado sin ningún tipo de posibilidad de propagación.
Dada la dimensión de las naves siniestradas, cantidad de combustibles y el riesgo de que colapsen algunos paramentos y paredes exteriores, los bomberos intentaron extinguir las llamas solo en aquellas zonas sin riesgo para los intervinientes. En el resto arden de manera controlada.
En cuanto a la columna de humo, inferior a la del martes, la Guardia Civil de Tráfico controló que no cambiara la dirección del viento y el humo bajara de altura y se depositara en la A4, para evitar cortes y desvíos alternativos.
Por otro lado, trabajó en la zona una unidad de drones de los bomberos madrileños, operativa desde hace unos meses, que se utiliza principalmente en los incendios de cubierta, naves, y en los forestales. Así, llega a donde no llega una escala y evita poner en riesgo a los profesionales. Además, cuenta con cámaras térmicas para observar donde hay más carga calorífica.