ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
«Nos vamos a entender con Ayuso y a sacar muchísimas cosas adelante»
Rocío Monasterio Candidata de Vox en Madrid La dirigente de la formación de Abascal cree que las elecciones en Madrid son la oportunidad para acabar con «el guerracivilismo del ‘no pasarán’»
Rocío Monasterio (Cienfuegos. Cuba, 1974) está convencida de que las próximas elecciones del 4 de mayo en Madrid pueden abrir un nuevo momento político en España, que ponga fin al «guerracivilismo» que, a su juicio, han traído Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. El enemigo a batir de la candidata de Vox es la izquierda. Con el PP admite que «tenemos que conseguir entendernos», vaticina que con Ayuso no será difícil y que harán muchas cosas. No aclara si desde dentro o desde fuera del gobierno de la Comunidad. —La campaña electoral ha estado centrada en la violencia. ¿Cree que ha sido una estrategia de la izquierda para esconder la derrota histórica que pronostican las encuestas?
— La izquierda no quiere debatir, no tiene ideas, no puede ir a los barrios, y lo único que le ha quedado ha sido la violencia. Habiendo estado en el Gobierno no han sido capaces de cumplir con nada de lo que dijeron a los españoles y por eso mucha gente que votó a la izquierda votará al bloque de la derecha.
—¿Ha habido juego sucio?
— Hemos visto a un presidente del Gobierno amenazar a cuatro millones de españoles de Vox y decir: «Esta es la última línea que van a pasar». Esto es gravísimo, pero es lo propio de los totalitarios que quieren controlar los medios de comunicación y las instituciones.
—Vox empezó la campaña con unas expectativas a la baja y ha ido recuperando terreno. ¿Serán claves para frenar a la izquierda?, ¿se han cumplido los objetivos que se marcaron? — Vox es clave para frenar a la izquierda y para que se dejen de hacer políticas de izquierda. Hemos tenido a partidos que han tenido mayorías holgadas y cuando han llegado al poder no han desmontado las políticas de izquierda, como sucedió con el Gobierno de Rajoy. Nosotros siempre cumplimos y los españoles cada vez lo ven más claro.
—Las encuestas desmienten a la portavoz socialista, Adriana Lastra, que al grito de «no pasarán» quería escenificar la posibilidad de que la izquierda superara a la derecha. La derecha sí va a pasar, ¿Madrid puede ser el inicio de un cambio político en España?
— Estas elecciones son la gran oportunidad para España y se abre un camino ilusionante de dejar atrás este guerracivilismo del «no pasarán» de Lastra», la miseria y las ruina del Gobierno de Sánchez e Iglesias, este gran engaño. Lo que hay que hacer es tener equipos serios, de gente que pueda liderar una salida a la crisis social y económica.
—Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se han implicado personalmente en la campaña. ¿Si salen derrotados puede ser el principio del fin de la izquierda en La Moncloa?
— Ellos mismos se han buscado el fin, en el momento que han engañado a todos. Madrid es el primer paso. Es un momento ilusionante, de esperanza y de dejar atrás todo esto.
—La última encuesta de ABC indica que Ayuso podría no necesitar el «sí» de Vox para ser investida presidenta, le bastaría la abstención. ¿Contempla Vox esta posibilidad?
— Vox se plantea que el 4 de mayo tengamos mucha fuerza para frenar las políticas de la izquierda y las tentaciones del PP de pactar con el PSOE. Si yo necesito los votos de la señora Ayuso por supuesto que los aceptaría para frenar a a izquierda y si la señora Ayuso los necesita, por supuesto que los tendrá, con unas condiciones. Quiero que la señora Ayuso lo diga con claridad. Le quedan dos días para que, con valentía, diga a sus votantes, lo que va a hacer con los votos de Vox.
—Si usted gobernara con Ayuso, ¿qué consejerías le gustaría gestionar?
— Lo que quiero es una reducción de consejerías. No podemos seguir con 13, que fue el resultado de la coalición del PP con Ciudadanos. Con siete, sobra. Y no quiero 136 diputados en la Asamblea; con la mitad, nos sobra. Eso es lo que ahora mismo tengo en la cabeza sobre las consejerías. Cuando tengamos los votos el día 4 por la noche entonces veremos cuál es la fuerza que nos han dado los madrileños. El 4 de mayo es la grandísima oportunidad para dar un viraje, un cambio de rumbo a España y volver a la esperanza. —Ayuso ha anunciado su intención de reducir de 13 a 10 las consejerías, en línea con lo que Vox ha pedido. ¿Se puede interpretar como un gesto a Vox ante un posible pacto de gobierno?
— Entonces se negociará para que bajen de 10 a 7.
—¿Vox va a pedir que se derogue la Ley LGTBI?
— Si ganamos las elecciones y estamos en el Gobierno de Madrid, hay que derogarla. Si soy presidenta la derogo al día siguiente, sin ninguna duda. Aquí nos tenemos que plantar y la libertad de los padres para elegir los valores de nuestros hijos es algo que se tiene que respetar. Yo respeto a otros padres que no piensan como yo, pero quiero que nos respeten a nosotros.
—Esta campaña se ha caracterizado por la tensión, quedan dos días, ¿teme algún tipo de maniobra de la izquierda para convulsionar el final?
— Tentaciones tienen seguro porque son antidemocráticos, lo que quieren es imponer su discurso. Lo que pasa es que los españoles no les creen, han perdido la credibilidad. Sánchez e Iglesias odian todo. El consejo que le doy a Sánchez es que se retire lo antes posible.
—¿Los resultados de Madrid pueden abrir una puerta a una colaboración futura entre el Partido Popular y Vox en España?
— Ya hemos colaborado en Madrid pero había un tercero en discordia, el señor Aguado, que lo hacía todo imposible. Era un matrimonio de tres. Hemos intentado que este gobierno acertara. Los que tenemos claro que la izquierda es el enemigo de España tenemos que conseguir entendernos.
—Lo pregunta porque su relación con Ayuso es buena, cordial.
— La relación con Ayuso será mucho más fácil ahora que no está Ciudadanos. Nos vamos a entender perfectamente y vamos a sacar adelante muchísimas cosas.