ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Cerro inaugura un monumento dedicado a los trabajadores
Lillo
El pasado lunes día 3 de mayo, con motivo de las fiestas patronales en honor del Santísimo Cristo de las Injurias, el arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, inauguró en la localidad de Lillo un sencillo monumento dedicado a los trabajadores de la villa y a los padres de familia del municipio.
El monumento, que consta de una pequeña imagen de san José en piedra natural está situado en la fachada de la casa y centro parroquial del municipio, consta de una inscripción recuerda a los «padres de familia y trabajadores del pueblo, a quienes pone a San José Obrero por modelo».
Dicha imagen ha sido promovida por el párroco de este pueblo de unos 3.000 habitantes, Jesús Torresano Perea, que recordó en el momento de la inauguración y bendición que « este sencillo homenaje era una deuda personal y de la parroquia con tantos padres y trabajadores de todas las clases que han luchado por sus familias para sacarlas adelante, y sobre todo como recuerdo a aquellos que han fallecido, últimamente a causa de la pandemia y a todos los padres y trabajadores»
Este acto está enmarcado en los eventos que se están realizando con motivo del Año Santo de San José en conmemoración de la declaración del 150 Aniversario del Patrocinio.
Posteriormente a la bendición del monumento se celebró, respetando las medidas de seguridad y sanitarias derivadas de la pandemia, la misa solemne en honor del Santísimo Cristo de las Injurias.
‘Sermón del Cristo’
En el pueblo está celebración, siempre concurrida recibe el nombre de ‘sermón del Cristo’, que fue celebrado por el arzobispo de Toledo, junto con el párroco Jesús Torresano y José Luis Vélez y Francisco Sánchez Brunete, sacerdotes hijos del pueblo y junto a ellos otros que se desplazaron de diversos pueblos de la comarca.