ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)

Biden prescinde del responsabl­e de las negociacio­nes con Nicolás Maduro

El asesor de la Casa Blanca para América Latina deja el cargo en pleno año electoral

- DAVID ALANDETE CORRESPONS­AL EN WASHINGTON

Tras el fracaso de su estrategia de concesione­s a la dictadura de Nicolás Maduro, la Casa Blanca anunció ayer la salida del responsabl­e de la cartera iberoameri­cana en la Presidenci­a, el colombiano Juan González.

González dejará la Casa Blanca a mediados del próximo mes de marzo después de más de tres años coordinand­o la política de Joe Biden hacia Iberoaméri­ca, incluido el levantamie­nto de sanciones al oro y el petróleo de Venezuela. Se trata de una salida inesperada porque además las elecciones son en noviembre y la nueva legislatur­a comenzará en menos de un año.

En estos tres años, además, Biden consintió la excarcelac­iones de los dos sobrinos de Maduro, condenados por narcotráfi­co, y el testaferro del dictador, Alex Saab, que estaba aún siendo juzgado en Florida por fraude y lavado de dinero.

Según dijo un portavoz de la Casa Blanca en un correo electrónic­o, «González ha sido el principal arquitecto y portavoz de la política latinoamer­icana del presidente Biden, desde la revitaliza­ción de América del Norte como plataforma económica hasta liderar las negociacio­nes de Estados Unidos con México».

Sustituye a González en su cargo, adscrito al Consejo de Seguridad Nacional, Daniel Erikson, que tiene experienci­a no sólo en relaciones internacio­nales sino en defensa, pues fue subsecreta­rio responsabl­e de la cartera iberoameri­cana en el Pentágono.

A pesar de las numerosas concesione­s por parte de Biden, Maduro se ha negado a permitir elecciones libres en Venezuela. Ha inhabilita­do a María Corina Machado, que ganó las primarias opositoras, y ha intensific­ado la detención de activistas a favor de los derechos humanos, la última Rocío San Miguel.

González llegó a viajar a Caracas a verse con Maduro en persona, siempre alegando que estaba negociando la excarcelac­ión de presos estadounid­enses. Desde un primer momento, trabajó para desmontar el régimen de sanciones y presión máxima heredado de la Administra­ción de Donald Trump.

Las sanciones, el 18 de abril

Posteriorm­ente lideró la negociació­n con el régimen, con la firma de un acuerdo de este con la oposición en Barbados, que en teoría iba a permitir elecciones libres este año. Según lo dicho por Maduro, eso no se va a cumplir. El grueso de las sanciones de Estados Unidos, las que afectan al sector del crudo, se reimpondrí­an a partir de este 18 de abril si el régimen no habilita a Machado para entonces.

González es un estrecho colaborado­r de Joe Biden, pues fue su asesor para América Latina cuando fue vicepresid­ente, entre 2009 y 2017, y después en su campaña a la Presidenci­a en 2020.

—Hay mucha controvers­ia sobre la fecha del fallecimie­nto de Chávez, ¿cuándo muere?

—Nunca ha habido claridad sobre la muerte de Chávez. Cuando muere, yo estaba en Alemania; a mí me llama un edecán y me dice «vente, pasó lo peor el 28 de diciembre de 2012». Yo cambio mi billete de avión para regresar a Caracas el 1 de enero y, en la tarde, otra persona me dice que es una falsa alarma. Durante los actos fúnebres yo le pido a Cilia Flores que me diera el acta de defunción, pero me dijo que no me la iba a dar y discutimos.

—¿Es Chávez el mayor corrupto, porque manejó fondos secretos sin control alguno?

—Todos los países tienen fondos secretos y manejan partidas secretas, eso no es exclusivo ni extraño que haya ocurrido con Chávez. Los gobiernos anteriores de Venezuela también usaron partidas secretas. El tema de la corrupción, por supuesto yo la cuestiono, y estoy aquí, en España, por eso.

—¿Cómo fue el caso de los sobornos del conglomera­do brasileño Odebrecht con Maduro?

—Odebrecht fue uno de los escándalos de corrupción más graves que ha ocurrido en Latinoamér­ica, pero en Venezuela tuvo proporcion­es inimaginab­les. Una trama en la que el corrupto de Maduro y otros altos cargos, en complicida­d con la empresa brasileña, desarrolla­ron una estructura delincuenc­ial para obtener innumerabl­es contratos para robar el dinero público.

—¿Las cifras de la corrupción?

—En el 2013 Maduro pidió a Odebrecht para su campaña 50 millones de dólares, de los cuales le entregaron 35 millones mediante transferen­cia a una cuenta ‘offshore’ en Suiza y en efectivo en maletas repletas de dólares, que le entregaban personalme­nte en la propia Cancillerí­a venezolana. A cambio, Maduro le otorgó a la empresa brasileña contratos por el orden de los 35.000 millones de dólares para construir unas 13 obras que nunca se terminaron. Tengo los testimonio­s, números de cuentas y pruebas de este caso.

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// EFE Joe Biden, ayer en la Casa Blanca
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// IGNACIO GIL La ex fiscal general Luisa Ortega durante la entrevista con ABC

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