ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Piden que «cuanto antes» se desarrolle el Pacto por la Caza de Castilla-La Mancha
El presidente de la Federación de Caza de Castilla-La Mancha, Agustín Rabadán, pide al Gobierno regional que «cuanto antes» comience a dar cumplimiento al Paco por la Caza suscrito en la región con las entidades del sector cinegético, porque se trata de una herramienta fundamental de apoyo para la actividad cinegética.
Rabadán aprovechó la celebración de la Gala de la Caza de Castilla-La Mancha, que se celebró en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), para lanzar esta petición al ejecutivo autonómico, al que recordó que se está ante un pacto que cuenta con el consenso de todos los partidos políticos. para el medio y la población que lo habita, que necesitaba tener protagonismo y nombre por sí mismo. Fue durante esta transición climática cuando bajaron las precipitaciones de los 600 mm anuales, dando lugar a lo que la población llamaba «ríos de invierno» y, por lo tanto, dejando inútiles los molinos hidráulicos durante varios meses al año.
«Los llamados molinos de torre, de funcionamiento eólico, vinieron a solucionar el problema existente con la industria hidráulica alimenticia, pero también -dice- se convirtieron en gigantes que impactaban en la psique de la sociedad, como bien dejó demostrado Cervantes en El Quijote. Su aparición es el ejemplo de cómo las sociedades se volvieron resilientes al cambio completo en el clima y en el medio que vivían».
Asimismo, Leonor Parra ha propuesto una cronología para estos periodos climáticos que retrasa la llegada de la Pequeña Edad de Hielo a La Mancha hasta el siglo XVI. Esta definición cronológica se ha advertido por la finalización de los brotes continuos de malaria, fiebres tercianas, que asolaron algunas poblaciones, pasando de las ya mencionadas 159 a las actuales 52. «El paludismo aparece definido como una enfermedad de transición climática en esta zona y ayuda a definir unas temperaturas que debieron ver su disminución palpable en cuestión de 30 ó 50 años. Si las temperaturas medias anuales durante el Periodo Cálido Medieval estuvieron entre los 16 y los 18 ºC en esta zona, durante la Pequeña Edad de Hielo fueron de entre 14 y 16 ºC, lo cual significa que bajaron unos 4ºC en las medias anuales», apunta la historiadora.
En definitiva, a los habitantes de La Mancha les cambió la vida durante el siglo XV, pero supieron encontrar la resiliencia para sobrevivir y seguir explotando el medio en el que vivían a través de lo que debían ser las nuevas tecnologías de la época: los molinos eólicos.
—¿Quégigantes?—dijoSanchoPanza.