El quinto tiroteo sucedido en Marbella en dos meses hiere a un joven de 21 años

Desde febrero la ciudad vive un repunte de violencia que suma ya tres heridos

Una vecina de Marbella se acercó al coche donde se había refugiado un herido y le dijo que si quería que llamara a la Policía, pero él contestó que no. Había huido de calle Arriate y acababa de recibir tres disparos en un nuevo tiroteo en la ciudad. Varios testigos ya habían avisado de disparos y gritos. Lo contó con el vídeo del suceso en redes sociales guardando su anonimato.

El hombre fue atendido en un aparcamiento cercano y luego llevado al hospital. «Había cuatro coches frente a la 14 en calle Almogía», decía un testigo. No se teme por su vida. Es el quinto tiroteo denunciado desde el 10 de febrero en una Marbella que parecía pacificada, pero donde las armas han vuelto a rugir, dejando tres heridos y ya cinco detenidos por estos hechos.

Una nueva oleada que llega cuando la ciudad se reponía de los ‘años de plomo’ de 2018 y 2019, aquellos en los que el crimen organizado sembró la Costa del Sol y, sobre todo Marbella, de cadáveres en ajustes de cuentas por los ‘vuelcos’ de droga. Ahora una nueva oleada de tiroteos está rompiendo la paz desde el lujoso barrio de Nueva Andalucía, donde un jardinero relata a ABC que ha visto operaciones contra chalets ocupados convertidos en burdeles o policías recogiendo al denuncia de robos de coches de lujo en la misma puerta de las casas.

Lo último fue en la salida ya para Istán, en la madrugada de ayer, cuando dos encapuchados trataron de robar una bolsa a un joven de 21 años cerca de la estación de aguas, en plena calle. Primero un forcejeo entre los dos asaltantes y la víctima. Luego los disparos antes de las carreras para huir.

Ante la resistencia del joven le dispararon en plena calle Almáchar, donde aún había manchas de sangre en la pared por la mañana, la Policía revisaba los arbustos en busca de vainas de alguna bala y las imágenes de la cámaras eran comprobadas para ver rutas y matrículas de los asaltantes.

Esas mismas que se reconocían en una grabación de un testigo, que registraba el asalto y la huida de los agresores en varios coches. Los vídeos están en manos de la Policía Nacional, que tiene abierta una investigación y trata de esclarecer cómo aquel joven acabó con un tiro en cada rodilla y otro en la pelvis a la altura del glúteo entre aquella vivienda.

El incidente no es un caso aislado. El primero de los sucesos se produjo el 10 de febrero, cuando dos encapuchados asaltaron a dos suecos y abrieron fuego en Nueva Andalucía, cerca del Hard Rock Hotel. Las víctimas lograron huir de ellos, pero uno recibió impactos de bala en un brazo y una pierna. Los sicarios se marcharon del lugar abandonado un arma tras unos arbustos y nueve casquillos. Semanas después fueron detenidos tres individuos por un intento de ajuste de cuentas entre clanes rivales. Dos en prisión.