ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Los frutos del arduo trabajo de Bodegas Eldoze
Eldoze 2018 y Finca Rosalejo 2020: a primera vista se distingue por su color rojo rubí intenso, brillante y cristalino. En nariz, sus complejos aromas a frutos rojos se encuentran en armonía con los matices que aporta la crianza en barrica. Su carácter mineral y gran concentración realmente destacan en fase olfativa. En boca es fresco, con recuerdos a cerezas, de acidez, equilibrado, elegante y con un paladar increíblemente suave en general. Una bodega innovadora: el edificio principal de la bodega Eldoze está situado justo enfrente del viñedo, en un entorno natural privilegiado. Destaca por un diseño innovador con materiales tradicionales -hormigón armado, abeto rojo finlandés y acero corten- y se integra a la perfección con el paisaje circundante. La bodega está equipada con maquinaria y tecnología de última generación, para garantizar la elaboración de vino de máxima calidad. Cuenta con espacios independientes para cada uno de los pasos del proceso de elaboración: zona de lavado de uva, cámaras para refrigeración post-vendimia, mesas para la selección manual de la uva, depósitos de acero inoxidable para la fermentación del vino, sala de barricas, y zona de embotellado y etiquetado.
Por su parte, el vicepresidente de Castilla-La Mancha, José Manuel Caballero, que asistió a la clausura, definió al Congreso como «estratégico para Castilla-La Mancha, porque es el sector que hace nacer, crecer y envejecer el vino, y el vino es un producto estratégico para Castilla-La Mancha». En este sentido, recordó que el 5% del PIB de la región está vinculado al vino y es el sector que más exportaciones genera rondando los 700 millones de euros.
El presidente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, Miguel Ángel Valverde, felicitó a los enólogos «por el cambio que esta profesión ha dado» gracias a los estudios del Grado en Enología, pero también por la experiencia acumulada de los enólogos.