Tras la Guerra Civil, la cual verá la luz a finales de año en el segundo volumen de ‘Las armas contra las letras’

Consejo de guerra contra cuatro redactores de este periódico

Al igual que otros periódicos de España, ABC sufrió las embestidas de la Guerra Civil y la posguerra. Una de las primeras víctimas fue Alfonso Rodríguez Santamaría, subdirector de este diario cuando se produjo el golpe de Estado de Franco en julio de 1936. «No creo que corra peligro, no he hecho daño a nadie. A la presidencia de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) fui con los votos de rojos y no rojos. No tienen de mí un solo agravio», les repetía a sus compañeros en la redacción cuando le pedían que buscase refugio en una embajada.

El levantamiento no triunfó en la capital, pero en sus calles reinó la violencia durante los siguientes meses contra todo aquel sospechoso de haber simpatizado con los golpistas. Nada de eso debería haber afectado a Rodríguez Santamaría, puesto que era solo periodista y sin ninguna conexión con los sublevados. De hecho, cuando fue presidente de la APM entre abril de 1935 y julio de 1936, durante la Segunda República, se dedicó a tender puentes entre los periodistas de izquierdas y derechas, divididos ya en el tenso ambiente de preguerra.

Aunque la Embajada de China le ofreció asilo, él seguía convencido de que no tenía razones para esconderse, pero se equivocó. El 20 de agosto de 1936, la Patrulla de las Milicias de la Prensa lo secuestró y lo trasladó a los descampados de la Dehesa de la Villa. Allí, sin ningún juicio previo, fue asesinado de dos balazos –uno en el pecho y otro en la cabeza–, junto a José Asenjo, otro compañero de ABC.

La República incautó entonces este diario y otros como ‘El Debate’, ‘Ya’ y ‘El Siglo Futuro’ y nombró a nuevos