ABC (Toledo / Castilla-La Mancha)
Los fijos discontinuos en paro son diez veces más de los que admite Díaz
Fedea eleva a 518.000 los inactivos con este contrato a cierre de 2022, contra los 60.000 que registraba la EPA Los expertos revelan deficiencias en la estadística del INE y el SEPE, y apuntan a la muestra de vidas laborales
La foto fija que ofrece el Gobierno cada mes con la remesa de datos sobre el comportamiento del mercado laboral dista cada vez más de la realidad que imprime el flujo de relaciones laborales de nuestro país, especialmente afectado por la aplicación de la normativa introducida con la reforma desde hace dos años. Tras esta distorsión creciente está la falta de transparencia sobre el estado de los trabajadores fijos discontinuos, activos o parados, que el Gobierno se resiste a clarificar. De hecho, tal es el nivel de desinformación que genera esta falta de datos a la hora de analizar el impacto de la reforma laboral y la caída de la temporalidad sucesiva a la normativa que los expertos están ahondando en este rastreo estadístico para tratar de arrojar algo de luz. Según el estudio presentado ayer por Fedea en esta dirección el volumen total de fijos discontinuos parados sería hasta diez veces mayor que el reconocido por el Ejecutivo.
En las últimas semanas la vicepresidenta del Gobierno Yolanda Díaz ha tomado la bandera de la cifra que ofrece la EPA del INE para comunicar el volumen de trabajadores con contrato fijo discontinuo en fase de inactividad, que a cierre de 2023 se situaba en 55.300 personas. Sin embargo, esta cifra ha sido puesta en tela de juicio en los últimos días tanto en cuanto difiere ostensiblemente de la cifra que se filtró procedente del SEPE en una respuesta en el Senado correspondiente a cierre de 2022 en la que se cifró en 443.078 los fijos discontinuos en espera de ser llamados, de los que 268.402 (algo más de la mitad) cobraba prestación por desempleo.
Y la cifra de la EPA también dista de la única pista de alta frecuencia que da el SEPE sobre el volumen de fijos discontinuos parados, que se insertan dentro del apéndice de demandantes de empleo con relación laboral –si bien los expertos ya sitúan esta bolsa de parados como poco relevante teniendo en cuenta que también, por ejemplo, recoge a las personas en situación de ERTE en esta situación de ‘impasse’ y otras situaciones laborales que permiten demanda de empleo–. Esta bolsa registró a cierre de 2023 la cifra de 746.077 demandantes, un récord y casi el triple que antes de la reforma laboral. Además, el registro de prestaciones contributivas desglosado por procedencia del contrato, revelaba que al menos a cierre de febrero en nuestro país cerca de 150.000 personas estaban cobrando el paro por el cese o paso a inactividad de un contrato fijo discontinuo.
Es por ello que el estudio presenta
En millones de personas