Aumenta la oferta de golf
Cantabria ya dispone de dos campos públicos de 18 agujeros
El golf público en España tuvo su origen en Cantabria, gracias a la iniciativa de Severiano Ballesteros con el Ayuntamiento de Santander que desembocó en el recorrido de nueve hoyos de Mataleñas. Ahora, cuatro décadas después, esta región uniprovincial vuelve a ser pionera al contar con dos campos completos de 18 agujeros después de la ampliación que acaba de acometerse en Abra del Pas. « Antes teníamos 15 hoyos y, aunque estaban homologados para torneos porque repetíamos algunos de ellos, no dejaba de ser un campo que se quedaba corto», comenta el director de la instalación, Luis Pérez San Miguel. Ahora se han añadido tres hoyos
ESTE CAMPO DE MOGRO HA MEJORADO UN 20 % SU CIFRA DE JUGADORES
más en la zona alta de la finca (que bordea la desembocadura del río Pas) y se han resideñado los de la más baja, lo que cambia totalmente la percepción que los golfistas pudieran tener del campo hasta ahora. «Con la distribución actual hemos ganado mucho –prosigue– pues somos más versátiles. Por un lado tenemos 18 hoyos completos para torneos federativos y comerciales y seguimos manteniendo las dos vueltas de abajo para los de niños».
Gracias a este aumento de posibilidades han notado un incremento del veinte por ciento en el número de jugadores, tanto por greenfees como por abonos. «Lo interesante es ver que no solo se han mejorado las ventas aquí, sino que también se han esti- mulado las conjuntas con Nestares (Reinosa). Ambos campos se complementan muy bien al ser totalmente diferentes».
Además de ganar en metros de juego, lo que más están destacando los jugadores es la experiencia visual que experiementan. «Desde la zona más elevada se ven alternativamente la ría de Mogro, su playa, el mar Cantábrico y las dunas de Liencres –comenta Pérez con orgullo– y también toda la obra de la parte inferior, en la que hemos construido dos lagunas interconectadas en forma de uve. Estas afectan a ocho hoyos y sirven para recoger el agua de la lluvia y aliviar los encharcamientos de antaño. Aparte, ya se están convirtiendo en un nuevo hábitat de flora y fauna».