PREGUNTA A BOCAJARRO
¿Su discurso no es un poco ingenuo?
Si no somos algo inocentes, copiaremos lo que ya tenemos. Hace cinco años las compañías se reían de estas ideas; hoy ya entienden que para retener a los humanos como clientes y trabajadores deben explorar otros modelos. Las ideas románticas son muy útiles.
¡No se trata de transformarlo todo en tres años, sino de llevarlo al día a día! Por ejemplo, que las reuniones empiecen con un minuto de silencio, donde la gente se mire un rato en silencio. A nivel personal, podemos preguntarnos qué nos hizo elegir nuestra profesión cuando éramos jóvenes y reconectar con tus sueños. Y mostrar todo tu yo. XL. ¿Sin esconder nada?
T.L. Por supuesto, eres libre de dejar fuera lo que quieras. Pero se trata de que haya una tolerancia hacia la vulnerabilidad, la tristeza, el enfado… Hemos dejado esas partes de nosotros fuera de los negocios, pero toda decisión de negocios es emocional; la XL. No es usted muy amigo del big data. T.L. Los datos son muy importantes y no son buenos ni malos. Pero no contienen la verdad objetiva. El paradigma en la última década ha sido: cuantos más datos se tengan, mejores decisiones se tomarán. Hace poco un amigo me dijo: «Cuantos más datos manejamos, menos certezas tenemos».
O