USO disfrute Y
Tras enamorarse de Madrid, un matrimonio afincado en Malibú pidió a Isabel López-Quesada una casa de espíritu abierto. Desenfado americano y elegancia europea a partes iguales.
En realidad la base decorativa es muy clásica, pero a la vez quisimos hacer una reinterpretación moderna y muy americana de la manera de vivir”, cuenta la interiorista Isabel López-Quesada sobre este apartamento en el centro de Madrid. Sus dueños, un gallego afincado en EEUU desde hace décadas CEO de una empresa tecnológica y su mujer, vinieron a la capital para una visita de tres días y, enamorados de la ciudad, acabaron comprando una segunda vivienda en el barrio de Salamanca. Le confiaron la remodelación de sus 300 m2 a López-Quesada con una premisa: que respetara la elegancia del contexto pero incorporando un estilo californiano y abierto, en homenaje a Malibú, donde residen. “Le di mucha importancia a que no hubiera pasillos ni puntos oscuros y lo solucioné con una serie de celosías en el hall y los tres dormitorios. Ahora la luz entra a todos los rincones”, cuenta la decoradora. Lopez-Quesada fusionó así el concepto de vivienda unificada en un espacio que engloba salón, comedor y cocina, con el de un piso señorial, al que añadió molduras, radiadores de forja, rodapiés, buenas carpinterías y detalles puramente hedonistas. “Es una casa para disfrutar, muy para ellos. En el salón se crearon diferentes zonas de descanso, para ver la televisión o charlar, y creo que el baño principal es de los mejores que he hecho. Pusimos una bañera inglesa, boiseries, mármol y granito y tiene balcones a la calle. Funciona como un salón”, asegura. En el mobiliario, mezcló con esa soltura que ya es marca de la casa: antigüedades con piezas del XX, siempre sin perder ese encanto europeo que encandiló a este matrimonio nada más pisar Madrid. “El resultado les ha gustado tanto que no se queda solo en ser su pied-àterre. Se vienen a vivir a Madrid”. ISABELLOPEZQUESADA.COM