“NOS ENFRENTAMOS AL DESAFÍO DE PROTEGER LA PRODUCCIÓN DEL IBÉRICO DE ATAQUES E INTENTOS DE IMITACIONES INTERNACIONALES”
¿Cuál ha sido la evolución del sector del porcino ibérico en España en los últimos años?
ASICI, como Interprofesional del Cerdo Ibérico, solo puede hablar en nombre del sector Ibérico, no en nombre del sector porcino español. En este sentido tengo que indicar que en los últimos 5 años, el sector Ibérico ha vivido una transformación promovida por dos factores clave: la aplicación de la Norma de Calidad (RD4/2014) y el compromiso y alineación de todos los actores que forman parte del mismo. El Real Decreto 4/2014 de 10 de enero que aprueba la Norma de Calidad para la carne, el jamón, la paleta y la caña de lomo ibérico, nace tras más de dos años de trabajo y negociaciones en el seno de las Administraciones, organizaciones sectoriales y la Interprofesional. Hoy, todos reconocen el efecto positivo que ha tenido la vigente norma de calidad para el porcino ibérico en materias como: • Recuperación de las producciones y precios para los ganaderos, que han mostrado en los últimos ejercicios una estabilidad no conocida anteriormente. • Diferenciación clara entre calidades de productos a través de diferentes precintos de colores en los jamones y las paletas y un etiquetado, con la denominación de venta y la mención obligatoria al % de raza ibérica, que permiten al consumidor elegir, con criterio y garantía, los Jamones Ibéricos que mejor encajen con sus necesidades. • Recuperación de los precios para los productos ibéricos • Más información, transparencia y garantía para los consumidores. Además, en su apuesta por la trazabilidad y la innovación y para colaborar en la correcta implementación de la normativa, el sector ha desarrollado y financiado ÍTACA, un sistema digital que integra y transmite la trazabilidad de los productos ibéricos, desde el nacimiento del lechón hasta la aparición del producto en los puntos de venta, pasando por los mataderos e industrias. Su puesta en marcha refleja el compromiso de todo el sector por ofrecer las máximas garantías de calidad, trazabilidad y transparencia al consumidor.
¿Cómo se encuentra dimensionado este sector?
Actualmente, en ÍTACA están registradas 16.416 explotaciones ganaderas, 80 ganaderos de España y Portugal, y más de 500 empresas transformadores y elaboradores que tienen absolutamente asumido el sistema de trazabilidad en su día a día y conocen los mecanismos para incluir la información necesaria en él. Como ejemplo, en la Montanera 2017/2018 se han contabilizada en ÍTACA 190.800 sesiones iniciadas, 2.217.842 páginas visitadas y 24.953 usuarios activos y registrados en el sistema. La implementación de ÍTACA en el sector es un hecho. Podemos estimar que la dimensión económica del sector Ibérico puede superar los 1.300 millones de euros, lo que representa en torno a un 6-7% del total de la industria cárnica española, según datos de ANICE. Y un dato importante, el sector Ibérico está vinculado al medio rural, potencia el empleo y asegura su futuro; dinamiza la economía de los pueblos y contribuye a fijar habitantes en un entorno en riesgo de despoblación. Se estima que el Ibérico genera empleo para 6.000 personas aproximadamente. En cuanto a las cifras de exportaciones, al no tener un código TARIC específico que permita una diferenciación arancelaria para las producciones de Ibérico, no hay datos reales, pero en el sector se estima que puede ser de un 10% del total de jamones y paletas, es decir unas 4.600 toneladas de producto en 2017, con un incremento del 10% con respecto a los datos de 2016, según datos del ICEX.
¿Cómo se está concretando la apuesta por la internacionalización del sector del Ibérico?
Hace unos días presentamos el #HamPassionTour, la campaña internacional de tres años co-subvencionada por la Unión Europea y el propio sector ibérico que, con un presupuesto cercano a los 6 millones de euros, nace con el objetivo aumentar el reconocimiento de los Jamones Ibéricos de España y posicionarlos en los mercados internacionales, así como divulgar el modelo europeo de producción, caracterizado por la calidad, la trazabilidad, la seguridad alimentaria y el bienestar animal. El #HamPassionTour es el fiel reflejo de la decidida apuesta de ASICI y el sector por la Internacionalización de un producto emblemático de la gastronomía española y la Dieta Mediterránea; el Jamón Ibérico. Un hecho inédito que llega en un momento clave porque ayudará a aumentar la comercialización, competitividad y el crecimiento del sector, generando oportunidades de negocio y de acceso a nuevos mercados en la UE y en Terceros Países.
¿Cuál es su valoración de la situación actual?
En estos momentos, como reflejan los datos, el Ibérico atraviesa un buen momento. A la profunda transformación y profesionalización que está experimentando en los últimos años, se unen todos los condicionantes necesarios para consolidar y aumentar los niveles de reconocimiento y consumo de los productos ibéricos. Buenas perspectivas sobre el mercado, el consumo nacional es estable, la cabaña ganadera ha aumentado (en número de cabezas y de reproductoras), mantenemos unas excelentes condiciones zoosanitarias y fitosanitarias, y hemos implantado con éxito un sistema de trazabilidad global sin precedentes en el sector, ÍTACA. El sector Ibérico tomó la senda de la recuperación en el año 2014, coincidiendo con la aprobación de la Norma de Calidad (RD4/2014), y en estos momentos ha alcanzado unas coordenadas de sacrificios, circulante y oferta más acorde al volumen de demanda, eminentemente nacional. Y lo que es más importante, se ha conseguido un escenario equilibrado y sin grandes desajustes entre los diferentes eslabones de la cadena. En 2017 se sacrificaron 3.564.150 animales, lo que supone un aumento de más del 60% con respecto a los animales sacrificados en 2013. Pero hay más muestras de la recuperación del sector y su compromiso con la Norma de Calidad puesta en marcha a principios de 2014. El pasado año se colocaron casi 6,5 millones de precintos de las cuatro categorías, un 35% más que en 2014, y en 2016, últimos datos disponibles, se han comercializado un 20% más de Jamones y Paletas Ibéricas que en 2013, superando la cifra de 11,5 millones, según el Registro Informativo del Ibérico (RIBER). Estas cifras son el mejor ejemplo de la recuperación del Ibérico, de la profunda transformación y profesionalización que está viviendo en los últimos años y que le convierten en un sector comprometido, fuerte y competitivo. Además, tenemos dos grandes hitos para el 2018. Uno es el arranque de la campaña internacional de promoción en la Unión Europea y Terceros Países, co-subvencionada por la Unión Europea y el propio sector con un presupuesto cercano a los 6 millones de euros, y que durante los próximos tres años tendrá como objetivo aumentar el reconocimiento de los Jamones Ibéricos de España y promocionarlos en los principales mercados internacionales (Francia, Alemania, Reino Unido, España y México). Y el segundo hito, tiene que ver con la inminente puesta en marcha de una aplicación para móviles (APP) que permitirá al consumidor, a través de su móvil, conocer la trazabilidad de cualquier Paleta o Jamón Ibérico del mercado. Es decir, hacemos partícipe al consumidor del proceso de elaboración y lo incorporamos al sistema. Dos grandes retos en los que trabaja la Interprofesional para favorecer la internacionalización de nuestros productos y empresas, así como el reconocimiento e identificación de los mismos en los mercados ante posibles imitaciones.
¿Cuáles son los principales retos que afrontan actualmente?
Para consolidar el sector y prolongar el buen momento que atraviesa, es necesario afrontar nuevos retos como la demanda del sector de actualizar ciertos aspectos de la Norma de Calidad, tras estos 4 años de aplicación, para adaptarlo a la realidad productiva actual. O la necesaria internacionalización de nuestros productos y empresas, así como el reconocimiento e identificación de los mismos en los mercados ante posibles imitaciones. Además, en esta sociedad global, nos enfrentamos al desafío de proteger la producción del ibérico de ataques e intentos de imitaciones internacionales. Parece inaudito pensar que un producto cuya característica principal es “ser Ibérico”, pueda producirse y comercializarse como tal en otro lugar que no sea la Península Ibérica. Para la defensa internacional de las producciones ibéricas el sector está unido para evitar que producciones ajenas a la Península puedan denominarse ibéricas. Hace ya varios años que todos los actores involucrados, a través de ASICI solicitamos la creación de una IGP (Indicación Geográfica Protegida) o en su caso una “Denominación Comercial” que se pueda utilizar exclusivamente en producciones que, además de cumplir la normativa oficial, procedan de animales que se hayan criado y sacrificado en la península, bajo los criterios de tradición y calidad como hechos diferenciales en materia tales como la trazabilidad, seguridad alimentaria, autenticidad, etiquetado, bienestar animal y sostenibilidad medioambiental. El esfuerzo del sector por evolucionar no ha hecho más que comenzar; a las importantes campañas de promoción internacional puestas en marcha por ASICI, se une el trabajo de la Interprofesional para consolidar el sistema de trazabilidad de los productos ibéricos, el apoyo a la I+D+i participando en estudios para minimizar o eliminar el impacto de los ataques a las poblaciones de Quercus, o colaborando en trabajos para actualizar los cálculos de la superficie arbolada cubierta, o el desarrollo de estudios para conocer la percepción de los consumidores y los mercados sobre los productos ibéricos. Sin olvidar la continua información al consumidor sobre los precintos de Norma de Calidad y su significado a través de la campaña “Elige tu Color, Elige tu Ibérico”. Todo ello con el claro objetivo de mejorar el posicionamiento de las producciones de Ibérico. El resultado es que, gracias a nuestro compromiso y unidad, hoy el Ibérico afronta el futuro con optimismo, consolidándose como un sector en permanente evolución, que lidera la digitalización en el área de la agroalimentación y que cuenta con el firme compromiso de garantizar la máxima calidad e información en cada una de sus producciones. Un sector legendario que se ha adaptado a las necesidades actuales del consumidor, cada vez más exigente e informado.