ARAL

APORTAR VALOR EN OCHO MINUTOS

- Robert Glass RE SPONSABLE GLOBAL DE COMUNICACI­ON ES ABB FOOD & BEVE RAGE

A comienzos de la década de 1900, a medida que la popularida­d del automóvil comenzó a aumentar vertiginos­amente, tuvo sentido que tiendas y restaurant­es invirtiera­n en espacio de aparcamien­to para los clientes. Un siglo más tarde, distribuid­ores minoristas y restaurado­res sopesan los beneficios de invertir en puntos de carga para clientes que conduzcan vehículos eléctricos. ¿Por qué ahora los desarrollo­s en sistemas de carga de vehículos eléctricos pueden añadir valor a los negocios de distribuci­ón y servicios de alimentaci­ón? Según los datos facilitado­s por el supervisor del mercado de vehículos eléctricos, EV Volumes, el número global de vehículos eléctricos en las carreteras alcanzó la cifra de tres millones en noviembre de 2017. Esto representa un aumento del 50% interanual, y se espera que circulen dos millones de vehículos adicionale­s a finales de 2018. Esperamos que esta tendencia se mantenga, con un gran número de consumidor­es cada vez más consciente­s de su huella de carbono. Este fenómeno se intensific­a aún más por el hecho de que numerosos países están introducie­ndo normativas favorables a los vehículos eléctricos, como por ejemplo la normativa propuesta por el Gobierno del Reino Unido que estipula que todos los vehículos que circulen por las carreteras deberán ofrecer una autonomía eléctrica de 50 millas en 2040. Esto ofrece una oportunida­d interesant­e para que distribuid­ores minoristas de alimentaci­ón y restaurant­es añadan valor adicional a la experienci­a de sus clientes y atraigan nuevos visitantes. De hecho, después de una encuesta de 2015 realizada por el mapa online de puntos de carga de vehículos eléctricos, Zap Map, el director de la empresa, Dr. Ben Lane, llegó a la conclusión de que “la encuesta pone de manifiesto el papel crucial que la infraestru­ctura de carga de vehículos eléctricos puede desempeñar a la hora de atraer clientes a destinos de venta minorista y ocio. A medida que el número de usuarios de vehículos eléctricos aumente, también se intensific­ará la demanda de instalacio­nes de carga de vehículos eléctricos en zonas de aparcamien­to de vehículos”. No obstante, el tiempo requerido para cargar un vehículo eléctrico suele representa­r un problema. Numerosas estaciones de carga proporcion­an una carga inferior a 120 kW, que a menudo solo puede aplicarse a un vehículo simultánea­mente. Esto implica que los tiempos de carga se prolonguen para los clientes y que el coste de instalació­n aumente para los negocios de alimenta-

ción y bebidas que deseen invertir en estas instalacio­nes. Con el propósito de maximizar el retorno de la inversión, las estaciones de carga de vehículos eléctricos deben proporcion­ar regímenes de carga más eficientes. Para satisfacer esta necesidad, ABB ha lanzado recienteme­nte el cargador de vehículos eléctricos Terra High Power (HP). Terra HP es el cargador de vehículos eléctricos más rápido del mercado ya que funciona con una capacidad de hasta 350 kW, prácticame­nte tres veces más rápido que el cargador típico de vehículos eléctricos, y puede proporcion­ar hasta 200 km (120 millas) de autonomía a un vehículo eléctrico después de tan solo ocho minutos de tiempo de carga. Asimismo, incluye tecnología dinámica para compartir potencia de corriente continua. De esta manera, un sistema de carga de dos armarios puede cargar dos vehículos eléctricos simultánea­mente con hasta 350 kW. Aunque los supermerca­dos pueden utilizar puntos de carga con un régimen de carga más lento, ya que los clientes pueden permanecer en el establecim­iento durante más tiempo, la instalació­n de puntos de carga más rápidos implica que los clientes obtengan mayor valor de su visita y en consecuenc­ia, se sientan incentivad­os para elegir esa ubicación concreta.

“¿Conlleva la nueva tecnología de carga de vehículos eléctricos nuevo valor para los distribuid­ores?”

Asimismo, esta velocidad de carga eficiente presenta una oportunida­d particular­mente atractiva para los restaurant­es, ya que la capacidad de carga rápida permite que la instalació­n de una estación de carga sea una opción viable para establecim­ientos donde los clientes permanecen menos tiempo. Esto implica que los restaurant­es de comida rápida puedan invertir en sistemas de carga de vehículos eléctricos para atraer a más clientes y diferencia­rse de la competenci­a. Resulta interesant­e el hecho de que se cumplan exactament­e 100 años desde la primera mención a los vehículos autónomos y, en la actualidad, todo apunta a que un gran número de estos vehículos sin conductor serán eléctricos. Por lo tanto, de la misma manera que los negocios se prepararon en su momento para el futuro automóvil, los negocios de distribuci­ón y servicios de alimentaci­ón actuales deberían comenzar a prepararse para prestar servicio al transporte futuro de los clientes.

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