Alemany asume el reto del Valencia de Peter Lim
“No tengo una varita mágica”
La última vez que Layhoon Chan habló en público en Valencia fue cuando dijo lo de “yo soy Peter Lim, ¿lo entendéis?”. Entonces, en la sala de prensa de Mestalla a la presidenta le acompañaban García Pitarch y Cesare Prandelli. Tres largos y turbulentos meses después, en la presentación de Mateo Alemany como director general, Layhoon Chan se sentó una fila por delante de José Ramón Alesanco y Salvador González Voro. El nuevo orden del Valencia.
La presidenta tomó la palabra sólo para dar la bienvenida a Mateo Alemany. Sin preguntas y dando pequeñas pinceladas de por qué se le ficha y su misión. “Proyecto a largo plazo (...) fortalecer la estructura de gestión (...) dar a la dirección una mayor responsabilidad (...) conoce bien el futbol español (...) supervisará todos los departamentos del club (...) informará a la presidenta (...) será el portavoz del club”, fueron sus explicaciones.
Tras ella tomó la palabra Mateo Alemany. Sin discurso ni agradecimientos. A puerta gayola a por las preguntas. Hasta 24 contestó. Intercaló respuestas en castellano y en mallorquín, en un guiño al valenciano. No rehuyó ninguna pregunta, aunque supo no meterse en ningún charco. Tiene tablas tras 20 años en el mundo el fútbol.
“El Consejo representa al accionariado y tiene la decisión final. Por los años que trabajé con Antonio Asensio, sé que los accionistas mayoritarios, en cualquier entidad mercantil, tienen las decisiones finales; otra cosa es que ellos deleguen el trabajo de propuesta final”, dijo.
Alemany desembarca en Mestalla para ejercer de manera “inmediata”. “Los códigos y las reglas del fútbol hay que respetarlas. Eso no se hace con inventos sino con tiempo y organización (...) no tengo ninguna varita mágica, sí ilusión, trabajo y experiencia”. Recalcó que “no es momento de fichar entrenador”. Estaba Voro y “estamos en competición”.