Ter Stegen se rehabilitó con paradas y sin errores de pie
Bajo sospecha como estaba después de su gravísimos error en Balaídos, Marc André Ter Stegen se puso en paz con el Camp Nou en una noche que él mismo definió como “increíble”. Ovacionado ligeramente a su salida en el calentamiento, su nombre fue luego coreado durante el partido y al final. Lo mejor para el Barça es que Ter Stegen fue noticia por sus paradas, no por el juego de pies. El alemán estuvo inspiradísimo. Primero se mantuvo inmóvil ante Nolito y no corrigió su posición. Luego le hizo un paradón a su compatriota Gundogan. Adivinó su golpeo con el interior y sacó una fabulosa mano izquierda. En la segunda parte, demostró que también sabía ir abajo y con la mano derecha en un lanzamiento de De Bruyne.
Ter Stegen comprobó los caprichos de fútbol. Compareció en el partido amenazado por Bravo, que podía dejar en duda la elección del alemán por parte del Barça como portero del futuro. Sin embargo, se marchó reforzadísimo. Acabó el partido en el cielo y Bravo, su rival por la titularidad durante dos años, en el suelo. El objetivo del alemán, que ha agradecido el apoyo de la plantilla a su filosofía de juego, es ahora mantener la regularidad en los próximos meses.