Phill Neville supo dar en el clavo

Phill Neville no habla de oídas en este excitante asunto. Ha compartido vestuario con Cristiano y le ha visto crecer como jugador y como hombre. Pero no le ata ningún vínculo personal más allá de haber sido compañeros durante tres años en el Teatro de los Sueños de Old Trafford. Durante la presentación de la biografía del portugués escrita por el compañero Guillem Balagué, Phill soltó una perla que casi me hace ponerme en pie y sacarle a hombros de la plaza: “Ronaldo va a ganar el Balón de Oro y, además, es el mejor jugador del mundo. Sin duda”.

Lo dijo sin miedo, sin titubeos. Parece que se está institucionalizando una perversa corriente de pensamiento único basada en proclamar a Messi como Balón de Oro vitalicio, olvidándose de los méritos adquiridos en el año natural, dentro del periodo decidido por los organizadores del prestigioso trofeo. Existe una manía de orientar el premio hacia quién es el mejor futbolista del mundo. Algo tan subjetivo que desterraría toda credibilidad al asunto. Messi ganó el Balón de Oro de 2010 pese a no marcar un solo gol en el Mundial y pese a las hazañas de Xavi, Iniesta y Casillas en Sudáfrica. Tampoco ganó aquella Champions (el Inter de Mourinho eliminó al Barça en semifinales...). Cristiano ha sido este año The Best. ¡Qué grande eres Phill!