Cierre parcial de El Molinón por gritos racistas
Los profirió contra Williams
EI Comité de Competición decidió ayer sancionar al Sporting con el cierre parcial de El Molinón como consecuencia del expediente abierto por los cánticos racistas contra Iñaki Williams, jugador del Athletic, que denunció el árbitro aragonés Clos Gómez, encargado de dirigir el primer partido de LaLiga en el estadio gijonés.
A través de un comunicado, el Sporting mostró su “absoluta disconformidad” con la resolución por entender que “es injusta y desproporcionada”. La entidad rojiblanca anunció, de igual modo, que presentará el correspondiente recurso (“en defensa de sus derechos y el de sus abonados”, matiza), que agotará la vía administrativa y que no descarta, incluso, recurrir a la jurisdicción contencioso-administrativa.
El Sporting entiende que “aun aconteciendo un hecho que pudiera calificarse como racista, violento o xenófobo, no debe éste derivar en responsabilidad para el club”.
La nota pública concluye de forma contundente, afirmando que el Sporting “no va a consentir ni tolerar que una sanción de esta naturaleza manche el buen nombre de nuestra histórica institución, así como el de una afición que pasa por ser modélica y cuyo proceder tanto en El Molinón como en sus continuos desplazamientos es reconocido públicamente como intachable”.
Según reflejó Clos Gómez en el acta de aquel Sporting-Athletic, del 21 de agosto, en el minuto 22 detuvo el partido durante un minuto “debido a que desde uno de los fondos se profirieron sonidos imitando la onomatopeya del mono”, dirigidos a Iñaki Williams.
Respuesta El Sporting califica a su afición como “modélica” y recurrirá la sanción