Alemania imitó el modelo de España y ha triunfado
Visitó varias veces la FEF e hizo un calco del fútbol base
Alemania y España ponen hoy en juego algo más que el título Sub-21. Está encima de la mesa la hegemonía sobre un estilo de juego, el tiqui-taca, que puso de moda La
Roja y que con el tiempo ha perfeccionado la Mannschaft desde las categorías más bajas hasta la absoluta.
Para entender lo que a nivel futbolístico ahora mismo son los alemanes hay que remontarse una década. Tras fracasar en la Euro de 2004 y no ganar su Mundial en 2006, la DFB, preocupada, traza un plan que mejore al fútbol alemán desde sus raíces. Obliga a los equipos profesionales a destinar una parte de su presupuesto al fútbol base y también manda a técnicos de categorías inferiores a ver metodología en otras federaciones. Ponen especial énfasis en la francesa y la española.
El caso de España es el que más les atrae. Una federación dinámica, entonces sin currículo en la absoluta pero con cada vez más títulos en los ciclos formativos, un ejemplo perfecto de buen trabajo a largo plazo. Los
➥ Visitas.
Como responsable de la cantera de la FEF sabrá mejor que nadie la estrategia que tomó en su día Alemania de copiar el modelo español...
—Yo no diría que lo copió, pero sí se inspiró en él. Era un momento en el que ellos estaban mal y decidieron fijarse en lo que funcionaba, que era nuestro modelo de trabajo. —¿Cómo lo hicieron?
—Vinieron varias veces a visitarnos, unas dos o tres. Fue a través de un grupo de estudio entrenadores alemanes, como otros muchos, visitan varias veces las instalaciones de la RFEF en Las Rozas. Consultan a Iñaki Sáez, a Ginés Meléndez, a Juan Santisteban.
El sistema de formación de los talentos les atrae.
Los campeonatos territoriales cadete y juvenil que organiza la RFEF junto a cada federación regional, también.
Igual que el sistema de juego empleado (un 4-2-3-1 o, en su versión más ofensiva, un 4-3-3). Se ficha a exinternacionales para que hagan de técnicos, como en el caso español. Se abre la puerta de manera decisiva a de la UEFA que fomenta el intercambio. Recuerdo que eran once personas de la federación alemana los que estuvieron. No sólo vinieron ellos, también de otras federaciones grandes como Inglaterra o Italia.
—¿Y qué vieron? —Estuvieron cuatro días. Yo traje a responsables de clubes españoles y también de la federación para que les explicaran cómo funciona nuestra hijos de inmigrantes, con Özil como máximo exponente.
Fruto de todo ello los resultados han ido llegando. En 2008, Alemania logra su primer título en categorías inferiores tras 24 años, el Europeo Sub-19. Al año siguiente viene la Eurocopa Sub21, el gran punto de inflexión del fútbol alemán. Los Neuer, Boateng, Hummels, Özil y Khedira ganan un título que les catapulta a la absoluta. Pero sobre todo abanderan un cambio de estilo. El mismo que cinco años después les hace campeones del mundo en Brasil. El estilo español.
Reciclaje Los fracasos en la Euro 04 y su Mundial 06 forzaron el cambio
Antesala Los Neuer, Özil y Khedira ganaron en la Sub-21 y luego en la A
estructura. Venían de caer en su Mundial y el propio Löw, nada más hacerse con el cargo, manifestó públicamente su deseo de imitar el modelo que mejor funcionaba: el español.
—¿Aún hoy se hacen esas visitas?
—Más en el fútbol femenino que en el masculino.
—Es obvio que a los alemanes les ha salido bien el plan...
—El equipo que ganó el Mundial de 2014 había pasado al completo por categorías inferiores, salvo Klose. Antes no ocurría así. En España ese ha sido uno de nuestros puntos fuertes. También el esquema de juego es igual: un 4-2-3-1 y un tipo de fútbol muy similar. —¿Y la estructura del fútbol base, la modificaron? —Hicieron minitorneos regionales como hacemos nosotros desde hace años. Incluso cuentan con más dinero y recursos que los nuestros. Han levantado 85 centros como Las Rozas y sus talentos entrenan allí dos días a la semana.