Nadal, la hierba y el número uno

El tenis se tiñe de verde y blanco, porque mañana comienza Wimbledon, el Grand Slam con más poso histórico. Y se mire por donde se mire, la 118ª edición tiene alicientes para convertirse en una batalla de juego y emociones. Roger Federer aspira a un octavo título y su 19º grande.

Rafa Nadal, a ser el segundo tenista en lograr tres dobletes Roland Garros-Wimbledon después de Bjorn Borg. Andy Murray, a convertirse en el primer británico desde Fred Perry en defender el título con éxito (este lo hizo en la prehistoria, entre 1934 y 1936). Novak Djokovic va a por su cuarto Championships. Stanislas Wawrinka, en silencio, podría convertirse en el noveno tenista en completar el Grand Slam… Pero, además, se va a ventilar la lucha por el número uno del mundo. Y parecía imposible a estas alturas. Murray comenzó el año con 9.110 puntos de ventaja sobre Nadal, que era noveno el 1 de enero. Hoy, sólo 2.105 les separan. El escocés defiende su campeonato y, por lo tanto, una bolsa de 2.000. El español, que no participó por lesión el año pasado, ninguno. Los dos se cruzarían en una hipotética semifinal. De ser así, ahí se estarían jugando el trono. Nadal no lo ocupa desde julio de 2014, cuando le sucedió Djokovic. Parecía imposible que con 31 años y tras un periodo de tres años sin ganar un Grand Slam, el mallorquín aspirara otra vez a mandar en el tenis. Pero ahí está. Si el relevo no se da en Wimbledon (también tienen opciones aunque más remotas Djokovic y Wawrinka), será después. Murray defiende 6.960 puntos hasta fin de año. Djokovic, 3.830. Federer, 720 y Nadal sólo 370. Es cuestión de tiempo.

“...SI EL RELEVO NO

SE DA EN WIMBLEDON

SERÁ DESPUÉS, ES

CUESTIÓN DE TIEMPO”