Borja, en noche de gatillo, asalta el Nuevo Arcángel
El Real Zaragoza logra en Córdoba su primera victoria
El que tiene un gran delantero centro tiene un tesoro. Y el Real Zaragoza puede sentirse muy afortunado con Borja Iglesias, una apuesta personalísima del director deportivo Lalo Arantegui que ya rinde pingües beneficios. El tanque gallego, en noche de gatillo, asaltó a lo grande el Nuevo Arcángel y firmó la primera victoria aragonesa de la temporada. En Córdoba tardarán tiempo en olvidar su exhibición y sus dos goles primorosos. Dos goles que relanzan al Zaragoza en sus expectativas y también en la clasificación.
Natxo González movió el once más de lo esperado, con hasta tres novedades: el central portugués Verdasca, que hizo su debut oficial con el Real Zaragoza, Febas y Toquero. Y al equipo aragonés le sentó de salida de maravilla esta mini revolución. El Zaragoza, decidido y sin complejos, agarró el mando del partido desde el primer minuto y se volcó sobre la portería de Stefanovic. Un centro envenenado de Toquero, un eslalon de Febas, un toque sutil de Buff... La línea de volantes, desatada, no dejó de insistir e insistir hasta que apareció Borja Iglesias, un delantero centro llamado a ser la sensación del campeonato en Segunda División. El ‘9’ del Zaragoza recibió de espaldas y con la izquierda un envío de Febas, se dio la vuelta y abrió el marcador de un derechazo seco y raso. Un golazo formidable que le hacía justicia a un gran Zaragoza pasado el primer cuarto de hora.
Pero la alegría le duró poco al equipo de Natxo González. Apenas tres minutos, porque Jona, el ariete del Córdoba, se aprovechó de una doble indecisión de Grippo y Verdasca dentro del área para igualar el marcador. El hondureño se ayudó con el brazo antes de su remate, pero el árbitro juzgó la acción como involuntaria, pese a las protestas visitantes.
El empate animó al Córdoba, que se hizo con la pelota y la iniciativa, y descompuso al Zaragoza hasta casi el descanso. Javi Lara, primero, y Jona, después, con un remate al larguero, tuvieron el segundo gol blanquiverde en sus botas ante la parálisis de un Zaragoza muy afectado por el 1-1 y al que no sostuvieron ni Javi Ros ni Zapater.
Tras el descanso, el Real Zaragoza desactivó a Javi Lara, el principal inspirador local, y recuperó la iniciativa del juego. Volvieron a aparecer el suizo Buff y el escurridizo Febas en la línea de tres cuartos y volvieron a aparecer los agobios para Stefanovic.
Carrión intentó reactivar a su equipo con la salida del extremo serbio Jovanovic, pero se encontró de inmediato con un nuevo gol de bandera de Borja Iglesias, el hombre del partido, un goleador superlativo que sorprendió al portero del Córdoba con un impresionante cañonazo desde fuera del área en el minuto 69.
El Córdoba se jugó ya el todo por el todo con las salidas de Markovic y de Sergi Guardiola, pero el Zaragoza, que acabó con diez por expulsión del capitán Zapater, se mantuvo firme y lo poco que concedió lo conjuró Ratón.
A cinco minutos del final el árbitro dejó pasar por alto, o no vio, un penalti por agarrón clamoroso de Josema a Borja Iglesias, con el que los defensores del Córdoba van a soñar toda la semana.