Osasuna evita la semana perfecta del Zaragoza
Ambiente extraordinario y una parte para cada equipo
El Club Atlético Osasuna se afianzó en el liderato de la Segunda División e impidió la semana perfecta del Real Zaragoza. En un partido intenso y de pierna fuerte, y con una parte para cada equipo, Borja Iglesias abrió el marcador de penalti al filo del descanso, pero Oier puso las tablas al cabecear un saque de esquina. En la despedida de las fiestas del Pilar, La Romareda registró la mejor entrada de la temporada, pero no pudo ver ganar a su equipo. Al Zaragoza se le hizo el encuentro muy largo y el Osasuna se llevó un punto muy merecido que le eleva por encima del Sporting, el Numancia y el Rayo.
Natxo González se decantó por Oyarzun para el lateral zurdo y sorprendió dejando a Toquero en el banquillo y alineando al georgiano Papu en la banda derecha. En el Osasuna, el central Aridane se acabó cayendo hasta de la convocatoria y Diego Martínez recompuso su defensa con Unai García.
Al Zaragoza, sobreexcitado por el ambiente, le costó entrar en el partido y anduvo diez minutos detrás del Osasuna, pero se rehízo con suficiencia y llevó la iniciativa durante el resto de la primera parte. Al remate blandito y a la media vuelta de David Rodríguez al larguero respondieron consecutivamente Buff y Papu con dos ocasiones muy claras ante Sergio Herrera. Y a la tercera fue la vencida: Fran Mérida, el mejor de una noche emocionante, derribó a Buff dentro del área y Borja Iglesias no perdonó desde los once metros. Quedaban sólo tres minutos para el descanso y el gol le hacía justicia a los méritos del equipo aragonés.
El Osasuna volvió del intermedio dispuesto a empatar el pleito por la vía rápida y el Zaragoza estuvo diez minutos sin salir apenas de su campo. Natxo González relevó entonces a un agotado Febas por Pombo para intentar revitalizar a su equipo, mientras Diego Martínez dio entrada a Xisco y Mateo por Coris y Quique para revolucionar más su ataque. Dos minutos después se lesionó Lucas Torró y el conjunto navarro se quedó sin cambios para afrontar la última media hora.
El que volvió a mover el banquillo fue el Zaragoza, incapaz de sacudirse el dominio del Osasuna en esta segunda mitad y con claros síntomas de agotamiento general. Salió Raúl Guti inmediatamente después de que Cristian Álvarez, otra vez providencial, conjurase un disparo envenenado de Mateo, pero el equipo navarro ya estaba lanzado y obtuvo premio a su insistencia al cabecear Oier en el primer palo un córner sacado por Fran Mérida. El ex jugador del Huesca gobernó el pleito durante muchos minutos de la segunda parte y demostró que la Segunda División le viene muy pequeña.
Al Zaragoza le quedaba la bala del agitador Toquero y se la jugó en el último cuarto de hora, con el público volcado como en las mejores noches. Pero este Osasuna, que sólo ha perdido un encuentro en este campeonato, anda sobrado de oficio para la categoría y se dedicó a enfriar el partido, dando por bueno un empate que le mantiene en lo más alto de la clasificación.
El equipo aragonés, con más corazón que cabeza, tuvo la victoria a última hora en dos acciones consecutivas de Raúl Guti y de Pombo, que acabó expulsado por un pisotón involuntario a Fran Mérida.