Bale se encuentra bien pero no tiene confianza
Declinó acabar el entrenamiento disparando a puerta con el resto
El galés empezó dando buenas sensaciones, completando la sesión al mismo ritmo que sus compañeros. Pero todo se torció en el tramo final del entrenamiento. A esta hora, la presencia de Bale ante el Al Jazira sigue siendo una incógnita. Zidane despejará hoy la eterna duda.
El Madrid abrió ayer al público su primer entrenamiento en los Emiratos Árabes como deferencia a los aficionados del país. Las gradas del campo de fútbol de la exclusiva New York University estuvieron ocupadas por casi un millar de hinchas, personas invitadas por la entidad blanca que no pararon de jalear a los jugadores, especialmente a Cristiano, Modric, Marcelo y también a Zidane.
El Madrid tiene dos escuelas de fútbol en el país, la de
Abu Dhabi y la de Dubai, ambas con unas instalaciones lujosas. Algunos de sus niños estaban allí. En el exterior se dieron imágenes llamativas, gente que no tuvo invitación para entrar y que decidió subirse a unos grandes adoquines que había al pie de la tapia que rodeaba el recinto para poder ver, asomando con dificultad la cabeza por encima de la misma, a sus ídolos desde la lejanía.
Sobre el césped, la principal noticia estaba en ver el estado de forma de Bale, que sólo ha jugado 30 minutos en los últimos 73 días. El galés empezó dando buenas sensaciones, completando la sesión al mismo ritmo que sus compañeros. Pero todo se torció en el tramo final del entrenamiento, cuando Zidane ordenó a los suyos ir hacia una portería para terminar como suele, haciendo que sus jugadores practiquen el remate a centros desde las bandas y también los disparos desde la frontal del área. Bale prefirió no realizar ese ejercicio. Se fue a la banda, habló unos minutos con sus fisioterapeutas de confianza y enfiló el túnel de vestuarios.
La escena no debe interpretarse como una alarma, pero sí como un síntoma de que el galés sigue sin tener confianza en su físico. De otra manera, se hubiera quedado a disparar. Le excusa el hecho de que casi al mismo tiempo que él se retiraron Varane, Kroos y Benzema. El primero acaba de salir de una lesión, y es duda para la semifinal, en la que podría tener unos minutos para rodarse antes de la final del sábado. Kroos y Benzema deben estar sobrecargados. A esta hora, Bale sigue siendo una incógnita. Zidane dirá hoy si está para jugar algún minuto mañana ante el Al Jazira (18:00h., La1).
Ramos, tocado.
El capitán protagonizó la otra noticia de la jornada. Sufrió molestias en el gemelo durante la sesión y tuvo que ser atendido. Sintió dolor y avisó a los médicos, que le pusieron en el gemelo izquierdo unas cintas de kinesiotape (cintas adhesivas terapéuticas) para evitar males mayores. No se puede descartar su presencia ante el Al Jazira estando Varane aún renqueante y Vallejo, aunque viajó con el equipo, fuera de la convocatoria inicial.
Zidane no dio pistas en cuanto al once. Repartió petos mezclando titulares y suplentes en los ejercicios con balón. Los porteros Keylor, Casilla y Moha realizaron ejercicios aparte siguiendo el método Llopis, que alterna el balón con pelotas de tenis. El entrenamiento tuvo una visita muy especial, la de Míchel Salgado, ahora embajador de la FIFA, que tiene residencia en Dubai, donde regenta una escuela de fútbol con más de 400 niños. Además, tiene un proyecto para abrir otras cuatro más por la zona.
Ausente El galés ha disputado sólo 30 minutos en los últimos 73 días
Público Casi un millar de aficionados presenció la sesión de ayer