Vigo, campo base de una escalada imposible
Bale (cinco goles y cinco asistencias en 845’) suplirá a Benzema
En el minuto 56 del Clásico del Camp Nou 20152016, Piqué adelantó al Barça y alejó al Madrid provisionalmente a trece puntos a falta de 34 minutos y siete partidos para el final de la Liga. Después remontó el partido (1-2) y el vuelo el equipo de Zidane (1-2),un recién llegado, y llevó la pelea hasta la última jornada. La perdió por un punto. Aquel viaje iniciático del francés fue un ejemplo de la resistencia a toda costa que está en el ADN del Madrid y también un ejemplo para el futuro. O sea, para hoy.
Zidane mandó un mensaje de fe prescindiendo en Soria de dos generales, Cristiano y Ramos, y varios coroneles (Modric, Kroos y Marcelo). La Liga sigue siendo una prioridad. Hoy faltarán Ramos, lesionado, el sancionado Carvajal y Benzema, cuya ausencia tras una dolencia postvacacional e imposible de situar en el tiempo sólo parece lamentar el técnico. Es la hora de Bale, que entre lesión y lesión, pasa a limpio sus cuentas: cinco goles y cinco asistencias en sólo 845 minutos. No juega un partido completo desde el 20 de
Onces De la Copa sólo Nacho repite; el Celta cambia a tres
septiembre. Así que el Real Madrid se toma su vuelta como un fichaje.
Zidane cambiará a diez de los once de Soria. Sólo repetirá Nacho. El resto será de gala, con Casemiro, Modric, Kroos e Isco, y Bale y Cristiano en punta, para no romper el 4-4-2. Mal enemigo para el Celta el portugués. Le ha metido 20 goles en 12 partidos y presenta su mejor ratio contra un adversario al que se ha enfrentado en cinco partidos o más: 1,66 dianas por choque. Además, el Madrid ha ganado en nueve de sus últimas diez visitas ligueras a Vigo.
Tampoco el Celta está para presumir. Sólo ha vencido en tres partidos de Liga en casa, aunque se sintió reconfortado por el triunfo en el derbi de Riazor. Maxi Gómez, que hizo seis goles en los primeros siete partidos, se ha secado. Y Aspas ha seguido el camino contrario: siete encuentros iniciales en blanco y 11 goles en los diez siguientes. Son la gran amenaza de un equipo que también retocará su once de Copa, aunque no tan radicalmente como el Madrid: volverán Rubén Blanco, Cabral y Tucu Hernández. De su parte estarán un Balaídos entregado y un rival que tendrá que pasar meses caminando sobre el alambre.