En Portugal ya no sólo brilla O’Magico
■ Como no podía ser de otra manera, los focos en Portugal se centran en Ricardinho. Cinco veces mejor jugador del mundo, campeón de Europa con el Benfica y con el Movistar, ganador de todos los títulos nacionales con el club madrileño... Un serio candidato a ser considerado el mejor jugador de la historia, pero al que le falta un torneo con su selección. Algo que, con 32 años, cada vez le queda menos tiempo para conseguir. “Es nuestro sueño y sabemos lo que hay que hacer para lograrlo”, asegura el mago de Oporto, que disputará hoy su primera final con la selección lusa (no estuvo en 2010).
Y en este torneo ha vuelto a ser la referencia (seis goles y cuatro asistencias), pero que Portugal haya dado el salto de calidad se ha debido a que esta vez han aparecido compañeros capaces de asociarse o dar descanso al astro. Es el caso de ya veteranos como Bruno Coelho, un talentoso ala del Benfica que es quizá, junto a O’Magico, el jugador más creativo; o Pedro Cary, ala potente y con llegada del Sporting. Ambos llevan cuatro goles en un torneo que también ha servido para que se confirmen valores como el potente cierre del Benfica, André Coelho (26 años), que anotó dos goles claves en la semifinal ante Rusia, Tiago Brito, Nilson, Fabio Cecilio o el pívot Tunha, que llegó con el difícil papel de sustituir al lesionado Cardinal y ha aportado minutos de calidad.
Todo ello hace que Portugal sueñe, como asegura su técnico Jorge Braz: “Hay que vivir y disfrutar este momento tan positivo que vivimos... y acabarlo de la mejor manera”.