Primer grande de Moyá como técnico principal

■ Carlos Moyá ganó ayer su primer Grand Slam como máximo responsable técnico de Rafa Nadal, tras la salida de su tío Toni. El mallorquín, que levantó el título en París como jugador hace 20 años, valoró la actuación de su pupilo: “Hubo momentos en los que jugó muy bien ante un rival que exige mucho como Thiem. Fue su mejor partido en el torneo, más difícil que la final del año pasado contra Wawrinka, porque esta vez hubo más competición”. Moyá conocía un aspecto clave para ganar al austriaco: “Sabía que en sus nueve enfrentamientos había ganado el que se había llevado el primer set, aunque no quise presionar a Rafa con ese dato. Hay que estar muy contentos”. “Hubiera sido una tragedia perder por eso, porque estaba todo muy bien encaminado. Nos dijo que no podía cerrar la mano por un calambre. Hubiera sido una sensación terrible”.

De ahora en adelante, Toni, que estuvo también algunos días en los torneos de Barcelona y Madrid, no se plantea si estará presente en otros Grand Slams, como el de Wimbledon, que arranca el 2 de julio en Londres: “En principio no viajaré, lo veré por la televisión. Vine aquí a ver unos cuantos partidos y después me decidí a volver para la final porque valía la pena venir a ver si ganaba mi sobrino”. ➥

Venía de ganar a Rafa Nadal en Madrid, pero no pudo arrancarle un set en París...

—La altitud en Madrid marca un poco la diferencia (por el bote de las bolas). Y también que la pista aquí es muy grande. Él puede restar muy por detrás la última línea. Eso es una ventaja para él. También para mí, pero contra los otros adversarios, no contra Rafa. No influye que haya sido a cinco sets, porque todos los tenistas de arriba estamos en muy buena forma.

—¿Ahora en qué piensa?

—-Mi gran objetivo es alcanzar otra final y hacerlo mejor de lo que lo hice contra Rafa. He dado todo lo que tenía, y aún así he perdido.

—¿Qué le parece lo que ha conseguido Nadal en París?

—Ha jugado muy bien, y por eso ha ganado once títulos aquí. Definitivamente, es una de las cosas más grandes que alguien puede conseguir en el deporte. Es algo muy excepcional y maravilloso. Es algo extraordinario.