El rey Felipe VI dio ánimos a los jugadores en el vestuario
Koke era el más afectado después de su error en la tanda decisiva
Felipe VI, acompañado del presidente de la FIFA, Gianni Infantino, encabezó la lista de autoridades presentes en el Luzhniki de Moscú. El Rey no pudo dar suerte a la Selección y tras el partido bajó al vestuario para dar ánimos a un grupo muy tocado.
El monarca dio un discurso en medio del vestuario y quiso saludar uno por uno a los 23 internacionales. También tuvo palabras de ánimo para Hierro, ya que conoce al seleccionador desde hace bastantes años y mantienen una buena relación. Hizo ver a los jugadores que habían sido superiores y les recordó que la parte buena del fútbol es que siempre ofrece opción de reivindicarse en el futuro.
El Rey realizó un viaje relámpago. Aterrizó a las 16:00 (hora local), apenas una hora antes del pitido inicial y voló de vuelta a España tras el encuentro. Fue el primer gran líder occidental en acudir a ver un partido de la Copa del Mundo. “Los galones de campeón los tenemos nosotros y hay calidad y ganas de sobra para demostrarlo”, había dicho antes del partido. En el choque no coincidió con Putin, que no fue al Luzhniki.
Rubiales le dio un afectuoso abrazo a Ramos cuando el capitán entró desde el césped al túnel
Rubiales.
Otro que quiso consolar al vestuario fue Rubiales. Comenzó con Sergio Ramos, a quien le dio un afectuoso abrazo cuando el capitán abandonó el césped entre lágrimas y entró al túnel. También estuvo muy encima de Koke, que una hora después del partido seguía sin contener las lágrimas...