España completa el pleno
Aplastó a Bielorrusia en Málaga y llega invicta a la segunda fase
La Selección de Sergio Scariolo, cuyo trabajo ha sido excelente, completó la primera fase de las Ventanas con un impecable 6-0 que le envía a la segunda en la mejor disposición para estar en el Mundial 2019 de China. Fran Vázquez lideró ante Bielorrusia a un bloque muy coral.
Como estaba cantado, la Selección de las Ventanas cerró con matrícula de honor la primera fase de clasificación para el Mundial de China 2019 después de ganar a Bielorrusia y completar un pleno de manual: seis victorias y cero derrotas que le dejan en una posición inmejorable para la segunda fase. El partido, como se esperaba, fue baño y masaje para una Selección que se había doctorado en Liubliana tres días antes.
Frescura. Bielorrusia aguantó lo que pudo, que sólo fue un cuarto. Demasiado poco para contender un equipo comprometido y coral que, pese a las ausencias por descanso de Aguilar y Rabaseda, estaba sobrado de vigor, frescura y argumentos (Brizuela y Yusta estiraron el número de debutantes en estas Ventanas a 17) para dar cuenta de una selección muy débil que, además, queda definitivamente eliminada.
El partido empezó raro en el Carpena. Los videomarcadores, que emitieron desde las 15:30 el partido de España para unos 2.500 espectadores, tuvieron que apagarse a ocho minutos del final del partido del Luzhnikí. Iban a sonar los himnos. Había que meterse en faena y darle al choque el rango que merecía, nada menos que un oficial de clasificación mundialista.
Después de un principio frío como efecto colateral del fútbol, Scariolo y sus chicos engrasaron la máquina y el Carpena se enchufó tras la salida del ídolo local: Alberto Díaz, el chico criado en Los Guindos, hizo un par de triples. Vicedo siguió sus pasos y Fran, al que también unen vínculos gigantes a Málaga (de hecho se ha estado entrenando las semanas antes a estas Ventanas en el Carpena), también dejó su sello. Al descanso, España ya ganaba cómodamente (38-28).
Los jugadores se esmeraron en divertir a la gente aunque la fragilidad de los bielorrusos impidió un mejor espectáculo. España rompió el partido en el tercer cuarto. Gustó mucho Oriol Paulí, el jugador que, como dice Jorge Garbajosa, puede jugar de “uno, tres,
cuatro…”. La fiesta terminó en 80-60. Todavía retumba aquella frase en septiembre, después del Eurobasket. “Las vamos a pasar canutas para estar en el Mundial”, dijo Scariolo poniendo en alerta sobre algo que él ya había venido preparando. Y los jugadores le han seguido en el camino. China está más cerca.
Superior España rompió el partido en la segunda parte y trató de divertir