Nadal sobrevive y Federer naufraga en una tarde épica
El balear, contra Djokovic en semifinales Anderson apeó al suizo
Tarde la de ayer para el recuerdo en Wimbledon. Los cuartos de final, con tres de los mejores jugadores de todos los tiempos en liza, Roger Federer, Rafa Nadal y Novak Djokovic, fueron un homenaje al tenis que empezó con la victoria del serbio contra Nishikori (6-3, 3-6, 6-2 y 6-2), continuó con la mayúscula sorpresa de la eliminación del vigente campeón, el suizo, a manos de Kevin Anderson y acabó con una oda en la que el español derribó a un grandísimo Juan Martín del Potro.
Dos partidos, estos últimos, resueltos en el quinto set, por encima de las cuatro horas de juego, excelentes cada uno a su manera, que pusieron en pie a los espectadores del elegante All England Tennis Club. El triunfo de Isner contra Raonic (6-7 (5), 7-6 (7), 6-4 y 6-3) quedó ensombrecido por lo que se vivía al mismo tiempo en la Central. Una batalla que encarriló Nadal, que luego tuvo cuesta arriba y que acabó con una remontada memorable entre revolcones (el balear terminó incluso en la grada al intentar devolver una bola), golpes ganadores (77 del argentino y 67 de Rafa) para todos los gustos, alternativas y exquisiteces de ambos jugadores, que al final se abrazaron como dos púgiles agotados. Para grabar, un banana shot, su famoso drive arqueado, de Nadal y una derecha a 200 km/h en carrera de Del Potro.
Ya había empezado el gran duelo de la jornada cuando Federer, desterrado a la pista 1 tres años después por las quejas de Djokovic (“Rafa y Roger han jugado cuatro partidos allí y yo solo uno”) sufría en su intento de frenar al gigantón Anderson (2,03), un especialista sacador contra el que restó de maravilla, sobre todo en el primer set. Pero tras ganar el segundo en el desempate, dejó escapar la oportunidad de cerrar su pase a semifinales al desaprovechar un match ball. El sudafricano acortó con determinación, ajustó su puntería y movió muy bien al campeonísimo de casi 37 años. La racha de sets seguidos sin perder de Federer en Wimbledon se paró en 34, igualando su propio récord y encajó sus primeros breaks para dejar en 85 el número de juegos manteniendo su servicio. En el último parcial hubo 24 (13-11).
Capítulo 52. Anderson, en su primera semifinal del Grand Slam británico, se enfrentará mañana a Isner y Nadal, en la sexta, a Djokovic, que llega a ocho. Será el capítulo 52 de su rivalidad, la más repetida de la historia, con ligera ventaja de Nole (26-25) y empate en The
Championships (1-1).