Mario Tennis Aces se apunta un tanto ganador
A pesar de su aspecto desenfadado es un juego profundo
En un año en el que los juegos de tenis se han vuelto a poner de moda tras una larga ausencia, destaca por encima de todos Mario Tennis Aces, la particular visión que tiene Nintendo de este deporte.
A pesar de su aspecto desenfado y estar protagonizado por los personajes más emblemáticos de la compañía japonesa: Mario, Luigi, Yoshi, Bowser, Donkey Kong... se trata de un título con una gran porfundidad estratégica y enormente divertido.
Dos tipos de control.
El juego puede ser disfrutado bien con un control clásico, bien con los Joy-Con, estos permiten mediante su revolucionario sistema de giroscopios
que el usuario los utilice como si de una raqueta se tratase. En esta opción los golpes son menos precisos, pero la sensación de disputar un partido real aumenta exponencialmente.
Mario Tennis Aces no es un simulador al uso, sino que está más cerca de un arcade tipo Mario Kart, donde el personaje escogido por el jugador ve mejoradas sus prestaciones a medida que progresa en la partida. Hay factores, como la energía, que influyen de manera decisiva en el desarrollo de los juegos, no es una buena idea correr a todas las pelotas.
Raquetas.
Como en todo juego de Nintendo hay ciertas mejoras que pueden ser utilizadas en momentos especiales y que otorgan una ventaja decisiva, aquí están las raquetas, que permiten llegar a restos imposibles o ejecutar golpes imparables, pero su uso es limitado y pueden llegar a romperse y con ello perder el encuentro.
Gráficamente, Mario Tennis Aces se muestra como uno de los mejores títulos de la Switch.