La mano de Francisco ya se nota en el Huesca
El equipo mejoró mucho en Sevilla
La mano de Francisco en el Huesca ya se ha dejado notar en poco menos de tres semanas. El entrenador almeriense ha perdido en sus dos primeros partidos al frente del conjunto azulgrana, pero la sensación de caída libre que tenía el equipo de Leo Franco, la ha frenado. El técnico andaluz está recuperando anímicamente a una plantilla hundida y los mecanismos tácticos que eran inexistentes, ahora empiezan a carburar. La dichosa tecla que permite sacar el máximo rendimiento a un equipo no parece tan lejana y los azulgranas confían en cambiar la racha de nueve partidos sin victorias.
Francisco ha probado dos sistemas muy diferentes: ante el Espanyol utilizó un 4-42, con cuatro jugadores muy ofensivos que le permitió tener 40 minutos buenos, y en el Sánchez Pizjuán apostó por el 5-2-3, con un equipo más compacto y que resistió 60 minutos a buen nivel ante el poderoso Sevilla. Unos brotes verdes que marcan el camino a seguir por parte de una plantilla que parecía perdida y que se agarran a las palabras de Francisco como única esperanza de futuro.
El preparador ha probado sobre el campo a 16 jugadores y le faltan por ver en partido a Sastre, Insua, Camacho, Santamaría y Christian Rivera. Precisamente, el centrocampista asturiano centra las esperanzas de los azulgranas. La presencia de Rivera en la medular podría propiciar ante el Getafe la llegada del 4-2-3-1, que es el sistema que más le gusta a Francisco. Su espectacular porte puede dotar de oxígeno a un equipo que físicamente ha sido inferior a todos los equipos esta temporada.
El choque de la undécima
Ante el Getafe El técnico recupera a Musto y sigue pendiente de Melero
jornada ante el Getafe está marcado en rojo por una plantilla que quiere utilizar el encuentro ante los de Bordalás como punto de inflexión. Un partido en el que el entrenador recuperará a Musto y que estará atento a la evolución de la pubalgia de Melero como herramienta fundamental.