Baldivieso debutó con 12... y lo dejó con 22

■ El caso de precocidad de Ovelar no es el más llamativo de Sudamérica. En 2009 debutó en el Aurora de Bolivia el jovencísimo Mauricio Baldivieso. Tenía 12 años. No hay registros de un jugador tan joven en ninguna otra liga del mundo. Al igual que Ovelar, la familia de Baldivieso provenía del fútbol y tenía una gran reputación en el país. Su padre, Julio César, fue uno de los convocados por Xabier Azkargorta para el primer y único Mundial jugado por Bolivia, el de 1994. De hecho, el padre era el entrenador del hijo cuando le hizo debutar. Aquello no gustó a la directiva del club, que le prohibió que lo alineará más. “No es normal que suceda algo así, nos sorprendió igual que al resto. Fue puntual”, recuerda el Bigotón, que aún reside en Bolivia. Tras salir del Aurora y jugar en Real Potosí y Nacional de Potosí, el prematuro Baldivieso fue pasando por otros clubes como Universitario de Sucre, Jorge Wilstermann y finalmente San José, donde terminó la temporada 2017 y no concretó su continuidad. “Ya no juega”, cuenta Azkargorta, que también recuerda que el jugador fue incluso convocado por la Sub-20 boliviana. A los 22 años, lleva un año sin equipo y no hay visos de que continúe jugando. “Nunca quiso salir de su tierra natal”, explican. Una década en el fútbol que está fuera de lo común: debutó con 12 y a los 22 lo ha dejado.