‘La ley de los baños’ le costó a Charlotte el All Star de 2017
En 1991, el viejo Charlotte Coliseum acogió un All Star en el que Dee Brown ganó el concurso de mates después de machacar tapándose los ojos con un brazo, Craig Hodges repitió en los triples y Charles Barkley fue el MVP del Partido de las Estrellas. Por entonces no había duelo de novatos. La NBA estaba a tres años de introducirlo en su gran fiesta anual. Desde entonces, múltiples formatos hasta el actual: el Equipo del Mundo contra el de Estados Unidos. Y con jugadores de primer y segundo año, desde que el lockout de 1999 dejó a la camada del 98 sin participar.
Desde 2015, 3-1 para el World Team con triunfos en las dos últimas ediciones y, este año, diez jugadores de diez nacionalidades distintas. Bogdanovic, MVP de la pasada edición, repite en un equipo liderado por los Lauri Markkanen, DeAndre Ayton (número 1 del último draft), Ben Simmons y Luka Doncic. Estos dos últimos, el vigente Novato del Año y el que será su sucesor en este premio, un Doncic que ha entrado en la NBA con una fuerza arrolladora. Enfrente, Trae Young, el base que intercambiaron por él Hawks y Mavs. Y el número 2 que fue elegido justo por delante, el ala-pívot Marvin Bagley. Los #Vamos (Movistar) dará en directo todo el All Star de Charlotte este fin de semana. entrenadores, otro detalle estupendo, serán Nowitzki e Irving.
Una noche, además, en la que no habrá representación española por segunda edición seguida (y tercera total desde 2006). Una pequeña sequía tras los años de bonanza abiertos por Pau Gasol (2002 y 2003) y a los que dieron continuidad Garbajosa, Navarro, Rudy, Marc (dos veces), Ibaka, Ricky (también dos) y finalmente, en 2017, Willy Hernangómez y Abrines. En el Spectrum Center no habrá presencia española pero sí estarán Doncic y otro ex de la ACB: Rodions Kurucs, que casi no tuvo minutos en el Barça la pasada temporada pero está aprovechando cada oportunidad que le ha llegado en Brooklyn. Hoy, como premio, se codeará con los mejores de su generación, una lista maravillosa de futuras estrellas. Empieza la fiesta en Charlotte. ■ La edición número 68 del All Star Weekend se celebra en Charlotte por segunda vez (la primera fue en 1991), pero este All Star tendría que haber sido en 2017, año en el que la cita se acabó trasladando de Charlotte a Nueva Orleans por culpa de la ley conocida coloquialmente como la ley de los baños, muy contraria a los intereses de la comunidad gay en Carolina del Norte.
Esa ley, aprobada por el gobernador republicano Pat McCrory, daba teóricamente mayor poder de decisión a los empresarios, pero lo que hacía en la práctica era suspender garantías contra la discriminación por razones de género y orientación sexual. Uno de los puntos más polémicos era el llamado bathroom bill, por el que las personas transgénero dejarían de poder elegir cuarto de baño en los lugares públicos. En teoría, esta ley pretendía recortar las opciones de ataque de depredadores sexuales. Pero acabó trayendo muy mala prensa y consecuencias económicas para Carolina del Norte. Y para Charlotte: el comisionado Adam Silver avisó primero y ejecutó después el cambio de sede del All Star.
McCrory, cercano a Donald Trump, salió de la administración de Carolina del Norte, la ley cambió (para muchos todavía no lo suficiente) y la NBA volvió a dar el All Star a Charlotte, esta vez en 2019.