Yamaha hace triplete en el test en Brno de MotoGP
—¿Es una decepción que Lorenzo se haya perdido Brno y no vaya a estar en Austria?
—Absolutamente, pero sobre todo es una decepción para él. Nosotros estamos fastidiados, porque nos gustaría que estuviera aquí y que se hubiera adaptado a la moto, pero la vida no es sólo lo que te gustaría. Nuestra ilusión y nuestro objetivo es, primero, que se recupere bien, y que vuelva a coger la chispa y el carácter de Lorenzo de llevar una moto de carreras a toda leche. Eso es lo que nos gustaría. Honda ha trabajado para ello y ha hecho lo que nos ha pedido. A veces no haces más porque no sabes más. Por nosotros no ha quedado.
—¿Cuánto le ha molestado que se haya ofrecido a Ducati?
—Yo no sé nada de este tema ni sé quién lo ha dicho. No sé si ha sido más un tema de Ducati, pero tampoco entro en esto. Jorge tiene un contrato de dos años con nosotros y lo que realmente me preocupa es que se ponga bien física y anímicamente.
—Si alguien puede dar la vuelta a esta situación es Lorenzo y Honda, ¿pero qué pasa si eso no llega a suceder?
—¿Cuántas historias que se planean en la vida no suceden? Casi todas. Todo el mundo planea sueños y, en el caso de Jorge, que le quiten lo bailado. Es un tío que ha ganado cinco mundiales. Ya me gustaría a mí.
—¿Es sostenible esta situación si no cambian las cosas?
—Es que la clave de todo esto es que él se ponga bien, porque también viene tocado, hace mucho tiempo que no está físicamente como toca. Es muy importante que recupere la forma física y luego, normalmente, la forma anímica entra sola. La combinación es lo que te hace hacer un día el click. Se dio unas castañas importantes en Qatar, en Barcelona y luego llegó el remate en Holanda. ¿Si es sostenible? Evidentemente que no me gusta, pero tenemos un contrato con él. Cuando decidimos ficharle fue porque creíamos que era nuestra elección. Cambiar el discurso sería un error. —¿Tener a Márquez hace que los problemas se lleven mejor?
—Son dos cosas separadas. Lo que pasa es que en un equipo top quieres tener dos tíos buenísimos que te aseguren victorias y el desarrollo de una moto con opiniones diferentes. También se buscaba eso con el fichaje de Jorge. Yamaha ni subió al podio de Brno ni estuvo cerca de hacerlo en la carrera del domingo, pero en el test del lunes se desquitó con un triplete protagonizado por Quartararo, Maverick y Morbidelli, y con Rossi sexto, superado también por Rins y Crutchlow. Pero más importante aún que encabezar la tabla de tiempos para la casa de los diapasones es que los componentes estrenados de la versión 2020 de su M1 parece que arrancan con buen pie. Dentro del secretismo que siempre acompaña a estos ensayos, se pudo ver claramente un nuevo colín de carbono en la Yamaha de Viñales, que se quedó a sólo 12 milésimas del 1:55.616 firmado por Quartararo. No todas las horas fueron aprovechables por culpa, de nuevo, de la aparición de la lluvia.
El que pudo estrenar el chasis recubierto de carbono de la Honda fue Crutchlow, que directamente se subió a una moto del equipo oficial aunque camuflada con el carenado del LCR Honda. El que también usó un chasis recubierto de carbono por una parte en su Aprilia fue Aleix, que sufrió una caída, lo mismo que Mir. Al de Suzuki fue a atenderle una ambulancia y eso provocó la aparición de la bandera roja, pero se encuentra bien. Márquez terminó octavo aunque se limitó a hacer diversas pruebas y no a buscar una vuelta rápida tras su victoria del domingo.
Confianza “Nuestra ilusión es que vuelva a coger la chispa y su carácter”