“Me sacarán o haremos elecciones cuando ellos quieran”
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—Estoy sorprendido. Hace dos meses todo era una maravilla, un sindicato unido, y se ha vuelto al revés. Voy a ser muy claro: la crisis surge porque se ha despedido a dos miembros de la Junta como trabajadores.
—Xavi Oliva y Queco Piña.
—Eso es. Necesitamos cambiar. Entendí que no estaban en la misma onda nuestra. Ahora están pidiendo elecciones, engañando a los afiliados de 2ªB y Tercera y diciendo auténticas barbaridades. Pido a los afiliados que vean la verdad. No podemos permitir que un tema individual salpique a AFE. A ellos se ha unido Jesule, que es nuestro vicepresidente y director deportivo. Utilizan a mucha gente.
—¿Se ha planteado dimitir como le piden?
—Sorprende que quieren dar información para que haya elecciones y el primer punto a tratar es cargarse al presidente. Tengo claro lo que he hecho y sigo haciendo para mejorar. Crearemos un sindicato mucho más potente porque este dolor me da más fuerzas para seguir. Nunca me voy a ir de AFE con mentiras.
—¿Hay alguien más detrás?
—Lo único que sé es que AFE debe ser independiente. No me pondré al lado de LaLiga ni de la RFEF. Perjudicaría al jugador.
—Los que piden convocar elecciones dicen que hay 600.000 euros sin justificar. ¿Es así?
—Totalmente falso. Tienen que inventar pruebas para que les hagan caso. Los jugadores pueden llegar a dudar. Nada. Totalmente mentira. Las cuentas se pusieron hace dos meses y sin esos despidos todo era perfecto. Ahora sacan la bomba. Está todo totalmente certificado.
—¿Cree que algunos de sus detractores arrastran el enfado de ver que usted llegó a la presidencia en 2017 por deseo de Rubiales y sin unas elecciones? —Es la Junta la que me propuso y yo dije que les agradecía la confianza pero que, hasta que no realizara una Asamblea de ratificación, no iba a ser presidente. La hicimos y sacamos un 99%. Agradecí la confianza de una Junta con 13 miembros.
—¿No cree que nada refuerza más que unas elecciones?
—Se me pasó por la cabeza, pero como los movimientos se hacen tan deprisa... Si hubiera sacado un 70% hago elecciones, pero fue más de un 90%. No tenía dudas. Fue arrollador.
—Ha molestado que ahora cree un Comité Ejecutivo independiente de esta Junta dividida.
—El CSD lo tiene. Todos los organismos lo tienen. Está dentro de los estatutos y da mucha más rapidez a todos los movimientos. Por obligación sólo tengo que hacer una Junta al año. —Parece que es para regatear a las ‘manzanas podridas’…
—Esa es la mentira. Las competencias siguen siendo de la Junta. No significa que vaya a utilizar siempre el comité. Los temas complicados, a la Junta.
—Le están llamando dictador.
—Me siento raro: no soy político ni manejo a la gente. La Junta, en la que están Xavi, Queco y Jesule, aprobó ese comité. Me parece una tomadura de pelo, pero es así. Lo único que he hecho es ponerlo en funcionamiento.
—¿La llegada de Futbolistas ON ha influido en esta tensión?
—Espero que no. Me sorprende que gente que está luchando por los futbolistas, rompa la baraja porque ya no cobre. Yo estoy aquí no solamente porque me paguen, sino porque lo siento. Se preguntarán los compañeros, por qué sale esto ahora. —Dígamelo usted. ¿Por qué?
—Si el sindicato es tan malo, ¿por qué no se han ido? Si el presidente fuera un cabrón, yo en su caso me hubiera ido.
—¿Tiene gente alrededor que le gustaría estar donde usted?
—Por supuesto. Todo se ha originado ahí. Cuando veo que una cosa se hace mal, lo digo. Ya le dije que no iba a ser la marioneta de nadie. Me sorprende que Jesule piense que le echaré.
—¿Confirma que seguirá?
—Sí.
—¿Y qué parte de culpa tiene usted en toda esta crisis?
—Vengo con toda la bondad del mundo a ayudar, pero cuando me doy cuenta de cosas, actúo.
—¿Y qué parte tiene Rubiales?
—Espero que ninguna.
—¿Espera?
—Creo que ninguna. Yo busco un sindicato independiente. —Me imagino...
—¿Los despidos influyen para que su relación con Rubiales, amigo de ellos, ya no fluya?
—Rubiales intenta hacer lo mejor en su trabajo y yo en el mío.
—Insisto con Rubiales para aclarar las cosas. Muchos, off the record, le señalan en esto y luego callan públicamente.
—Yo, el día que lo vea, lo diré. El presidente tiene bastante trabajo en la Federación como para meterle con el tema sindical. Por el bien del fútbol descarto que Rubiales esté en todo esto.
—A usted no le gustaba que él se enterara de cualquier cosa que pasaba en AFE al minuto.
—Cierto. No me gustaba. Ni que se entere la RFEF, ni LaLiga ni nadie. La información es poder.
—Hay mucha gente que se ha preocupado por usted estos días. ¿Rubiales le ha llamado?
—No. Estará de vacaciones. Le premiaron en Motril.
—¿No descarta que lo haga cuando vuelva?
—Es un tema interno, no tiene por qué entrar. Si me llama, le cogeré.
—¿Está feliz con los fieles que le quedan o esto puede ir todavía a peor?
—Estoy contento. No voy a permitir barbaridades. Si los afiliados quieren que haya moción o elecciones, estoy dispuesto. Ellos manejan este sindicato.
—¿Quién quiere relevarle? —Me imagino. (Sonríe). Jesule, Oliva y Piña estarían por ahí.
—¿Por qué se han ido Busquets y Nacho de la Junta?
—Lo están relacionando interesadamente con esto, pero no es así. Estaba pactado antes.
—Si diéramos marcha atrás, ¿volvería a entrar en AFE?
—Sí. Es la mejor decisión que Me costó mucho separarme de mi familia.
—¿Y en casa qué le dicen?
—Que si merece la pena. Y yo digo: “Papá, me sacarán de AFE cuando quieran los jugadores, pero no con mentiras”.
Rubiales “Descarto que esté detrás de la crisis interna del sindicato”
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