Las finales de Lisboa y Milán llegaron tras ganar en la jornada 1
Simeone consideraba primordial comenzar con victoria el campeonato liguero. Para el Cholo iniciar LaLiga con buen pie es algo fundamental, y más en este año donde han llegado tantos jugadores nuevos, aunque no siempre lo ha podido conseguir. De hecho, en sólo dos oportunidades el Atlético de Simeone había podido ganar el primer encuentro liguero. Lo hizo frente a Sevilla y Las Palmas, a lo que se añade el Getafe, donde el argentino lo consiguió por tercera vez desde que está en el banquillo rojiblanco. Y si miramos lo que hizo el Atlético en los dos años que comenzó ganando el primer partido del campeonato, hay muchos motivos para el optimismo ya que en ellos conllevaron un gran camino en competición europea, alcanzando dos finales de Champions.
En la campaña 2013-14 el Atlético ganó 1-3 en el Sánchez Pizjuán. Fue el 18 de agosto de 2013 y los rojiblancos se
impusieron por 1-3, con el doblete de Diego Costa y el tanto espectacular del Cebolla Rodríguez. Ese triunfo en un feudo tan complicado como el del equipo sevillista dio mucha moral a los de Simeone. Ese año el equipo madrileño finalizó el ejercicio ganando el título liguero en el campo del Barcelona, su rival en la última jornada para levantar el trofeo y jugó la final de la Champions de Lisboa, donde cayó contra el Real Madrid en la prórroga tras encajar el gol del empate en el tiempo de descuento.
Dos años después, en la temporada 2015-16, el Atlético también empezó el campeonato jugando en casa. Y se impuso por 1-0 a Las Palmas en el Vicente Calderón, idéntico resultado al del pasado domingo. El gol lo marcó Griezmann, quien ya fue decisivo desde la jornada inaugural del torneo liguero. El Atlético acabó tercero en LaLiga y jugó de nuevo la final de Champions, esta vez en Milán. Estos datos seguro que le dan mucho ánimo a un técnico tan supersticioso como es Simeone.
El objetivo rojiblanco esta temporada es acabar entre los cuatro primeros el campeonato, aunque eso a la afición ya le sabe a poco, puesto que la plantilla se ha confeccionado para luchar por el título. Después del varapalo sufrido la pasada temporada ante la Juventus, la hinchada ya no habla abiertamente de la Champions, pero es otro de los retos del equipo, estar el próximo 30 de mayo en la final de Estambul.
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