AS (Aragon)

“Ni con diez minutos de ventaja estaría tranquilo”

Primoz Roglic se mostró precavido tras coger el liderato

- JUANMA LEIVA /PAU

No por esperado, tuvo menos mérito y Primoz Roglic fue una bala en la crono de Pau. Ganó la etapa y le metió 1:29 a Pogacar, 1:38 a Valverde, 2:00 a Superman López y 3:06 a Nairo Quintana. Sin embargo, su alegría no fue exagerada, como dejando muestras de que sólo ha dado un paso en su objetivo. Sólo se le vio con una abierta sonrisa cuando vio a su hijo recién nacido en la meta y cuando subió al podio con una celebració­n que arrancó los aplausos de los asistentes y del staff. Pero no parecía que hubiera asestado un enorme golpe a la Vuelta que ahora lidera. Y tiene sus razones: “Ninguna renta es suficiente con lo que queda por delante. No estaría tranquilo ni aunque hubiera sacado diez minutos”.

Los motivos del líder del Jumbo para no lanzar las campanas al vuelo son claros. La crono es su especialid­ad, como acredita su tren inferior potentísim­o (en persona impresiona) y su postura perfecta sobre la cabra, y sabe que a partir de ahora le va a tocar defenderse de unos rivales que no pueden hacer otra cosa que atacar constantem­ente: “No sé si me va a tocar controlar, para lo que tengo un gran equipo, o voy a poder intentar aumentar mi diferencia. Esa pregunta la responderé cuando llegue a Madrid”.

También es consciente de lo larga que se puede hacer una carrera de tres semanas, como ya vivió en sus carnes en el Giro de esta temporada que se le fue escapando en

la última semana hasta acabar tercero en la general. Finalmente acabó tercero: “Ya veremos si me ocurre lo de entonces, de momento me siento bien”. Y también ha podido comprobar que la Vuelta tiene trampas y dificultad­es que le han llevado al suelo en dos ocasiones, en la crono por equipos y en bajo el granizo de Andorra: “Dos caídas no han sido la mejor manera de comenzar una carrera tan larga, pero las he salvado bien y espero rodar seguro los próximos días y no tener más problemas”.

Eslovenia brilla.

Un Roglic que, a sus 29 años, se estrenó en la Vuelta (ya tiene etapas en las tres grandes) y que aspira a ser el primer esloveno en conquistar una. De momento, este corredor que era saltador de esquí hasta 2011, va en camino, aunque tiene un compatriot­a que también aspira a ello como Tadej Pogacar, quien se acercó al tercer puesto en la general y para el que tuvo unas palabras: “Es muy joven, pero un enorme talento. Además de una gran persona. No me sorprende lo bien que le van las cosas. Es estupendo tener cada vez más eslovenos brillando en las grandes carreras ciclistas”.

El joven corredor del UAE, de 20 años (cumplirá 21 justo después de la Vuelta), fue el que vistió el maillot de campeón esloveno de crono (Roglic no participó en este 2019) y aseguró que lucirlo así fue un orgullo: “Siempre fue un sueño vestir el maillot con la bandera de mi país en una grande de tres semanas”.

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PODIO. Roglic y Pereiro reciclan la botella de cerveza con la que brindó.

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