Un recorte de 6 millones
La plantilla del Barça cobrará solo el 30% de sus salarios durante el parón
El baloncesto del Barcelona había presupuestado para esta temporada 41,4 millones de euros, con solo 9,2 en ingresos, por lo que las pérdidas se disparaban hasta los 32,2 millones al final del presente ejercicio. Con la crisis actual del coronavirus y para evitar unas pérdidas mayores en el que es el presupuesto más alto en la historia de la sección, el club ha rebajado el 70% del salario a la plantilla mientras dura el parón. Todos los jugadores han dado finalmente el visto bueno. Los que se habían negado dijeron sí el martes.
La apuesta por ganar la Euroliga y discutirle el dominio en la ACB al Madrid provocó que los salarios pasaran de 24,7 millones la temporada pasada a los 32,3 de la actual, un aumento del 32% (7,5 millones) con los fichajes de Nikola Mirotic (el contrato más alto de Europa con 4,4 millones de euros netos anuales), Cory Higgins, Brandon Davies, Álex Abrines y Malcolm Delaney. El déficit previsto era el más elevado de la historia de la sección después de cerrar en 2018 con 28,7 millones y en 2019 con 22,3, porque solo en masa salarial (sueldos de personal deportivo y cargas sociales) el gasto se disparaba a 32,9 millones.
Si la Liga y la Euroliga no se reanudan provocarán una pérdida de ingresos (competiciones, publicidad, retransmisiones y derechos televisivos y de comercialización) de 2,5 millones. El club debía abonar aún en salarios 8,9 millones en los tres meses que restan de temporada y esta reducción del 70% supondrá que solo desembolse 2,6 millones hasta final del curso, con un ahorro de 6,3 millones (2,1 por mes). Es decir, un recorte de 6,3 frente a una merma de ingresos prevista de 2,5 millones. La cantidad no pagada será superior a los ingresos perdidos, pero se parte de la base de que el presupuesto del baloncesto se sustenta por completo en el fútbol, en un dinero que ahora se ha recortado dramáticamente.
Para entender la aplicación de estas medidas hay que tener en cuenta varios aspectos. El presupuesto global del club para esta campaña contemplaba unos ingresos de 1.040 millones de euros, un gasto de 1.007 y un beneficio neto de 11,5 después de impuestos. Todo ejemplar sobre el papel, pero el club azulgrana tiene detrás del fútbol una serie de secciones deportivas (baloncesto, balonmano, fútbol sala, hockey patines y otras) que generan unas pérdidas totales al final de temporada de 51,9 millones.
Gran déficit. Con el fútbol base y otras actividades, el déficit conjunto es de 122,3 millones, según la memoria de la entidad. Si las competiciones no se reemprenden por la pandemia del COVID-19, la reducción en los ingresos podría alcanzar la cifra de 240 millones de euros. Un balance negativo en el fútbol arrastraría con él a todo el club, de ahí que el recorte en baloncesto sea más que un gesto solidario.