Abelardo alcanza los 100 días de desgracia
El Espanyol, todo incertidumbre
Entre turrones, comidas familiares y todo cuanto hoy suena tan lejano como lo fueron las fiestas navideñas, anunciaba el Espanyol, el 27 de diciembre, a Abelardo Fernández
como nuevo entrenador. El tercero de la temporada tras y Pablo
Hoy alcanza los 100 días, habitualmente de gracia, en este caso más bien de desgracia.
Todo naturalidad y cercanía, tomó el asturiano las riendas de un equipo que se acababa de situar colista y que dejaba la permanencia a cinco puntos. Nueve jornadas después, sigue en el fondo de la tabla con la salvación a seis. Los diez puntos de Abelardo los ha fraguado paradójicamente ante rivales poderosos, como Barcelona, Villarreal, Sevilla o Atlético, contra los que no ha perdido. Su triunfo frente al Mallorca fue la única final
en la que no falló, a diferencia de las derrotas en Valladolid o Pamplona, a pesar de contar con una inyección de 40 millones en el mercado invernal entre Raúl de Tomás, Leandro Cabrera y Adrián Embarba.
En el capítulo de desgracias también figuran las continuas expulsiones de capitanes (Javi López, Víctor Sánchez, David López y Diego López). Y, por supuesto, el haber tirado la Copa
ante la Real Sociedad y especialmente la Europa League, con pleno de suplentes en Wolverhampton, lo que precipitó una eliminación que tampoco ayudó a mejorar en LaLiga.
Para colmo, la pandemia estalló en plena estadía en Navata. Golpeó a seis miembros de la plantilla y desembocó en un ERTE que le afecta. Y todo con la incertidumbre de su destino, con contrato hasta junio, y obviamente el del Espanyol.
Balance El equipo es más colista con él, está fuera de Europa y vive un ERTE