TODIBO. MUY JOVEN Y MUY IRREGULAR
La semana pasada, en uno de los encuentros telemáticos que Javier Tebas mantiene con los responsables de los clubes profesionales, el presidente de LaLiga fue crudo con la situación creada por el coronavirus, que sin duda provocará una grave crisis económica en el fútbol. “Hay que olvidarse de los grandes fichajes y mirar más a la cantera y a los cedidos”, les avisó para que empezasen a preparar la próxima temporada sin excesos.
En el caso del Barcelona, el desplegable de los cedidos presenta diez casos que la secretaría técnica blaugrana deberá evaluar con una nueva mirada respecto a la prevista antes del estado de alarma. Aquí entran muchos factores. El principal es si el entrenador les ve un sitio en el equipo; el segundo es si pueden entrar en alguna operación para abaratar fichajes; y el tercero es cuándo acaban contrato. De los diez cedidos, cinco acaban contrato la temporada que viene (Oriol Busquets, Juan Miranda, Carles Aleñá, Cucurella y Rafinha); tres dentro de dos temporadas (Coutinho, Wagué y Todibo) y sólo Emerson tiene contrato hasta el 2024. Arda Turan va aparte. Acaba contrato y ya es pasado en el club.
Otro que Setién no llegó a tener bajo sus órdenes. Su salida debilitó el eje de la defensa y se marchó al Schalke en busca de minutos, donde ha tenido una participación irregular. El conjunto alemán se lo puede quedar si paga 25 millones, pero ya han advertido que no llegarán a esa cantidad. Quieren negociar a la baja o ampliar cesión.