“¡Le diste tanto al Barça, Leo!”

La explosión de Flaqui en Carrusel está llena de una impresionante historia del fútbol contemporáneo, la relación inigualable de Messi con el fútbol azulgrana. Dijo Flaqui, con la voz en un puño: “¡Le diste tanto al Barça, Leo!”. El partido empezó de madrugada, con la revelación del contrato del futbolista. Durante el día no era menor el ruido que desataba lo que iba a pasar cuando saliera al campo el argentino. Podría parecer que la gente esperaba que entrara de rodillas o que entrara escoltado con el insulto de los aficionados, por otra parte alejados de la cancha por culpa de la pandemia. Pues Messi salió como si no pasara nada; ni una imagen denotó la herida que parece que ahora late en el alma azulgrana del rosarino, que marcó ese gol impresionante que Lluis Flaquer subrayó como si estuviera resumiendo quince años y 650 goles. La garganta del periodista parecía el eco de esa larga compañía que el mejor de sus futbolistas le ha prestado a una afición y a un club que, como otros de su envergadura, han vivido hasta ahora gracias a jugadores de cachés estratosféricos. El ambiente de ayer, desde la madrugada a la noche, recuerda la sorpresa que expresó en Casablanca el policía que animaba las apuestas: “¿Ah, pero es que aquí se juega… con dinero?” Fue un buen partido, por cierto, como pasa siempre que se enfrentan Messi y Munian, por ejemplo.