Gracia, en el punto de Mina
El Celta sólo ha ganado uno de sus últimos 22 partidos sin Aspas El futuro del técnico, en el aire si pierde
L● a baja de Iago Aspas es una ventaja para cualquier rival. Lo dicen los datos y los hechos. Sin su estrella, el Celta no ha ganado ninguno de los últimos 10 partidos y solo uno de los últimos 22. Aspas, líder espiritual y corporal en tierras viguesas, ha participado directamente, haciéndolos o dándolos, en 15 de los 29 goles del Celta (51%). Así, su ausencia causa morriña por la Ría y optimismo por el Turia. Pero en Mestalla sí estará Santi Mina, viejo conocido de la casa, a quien Coudet le ha afilado el colmillo (tres goles en las últimas dos jornadas) y cuyos números están dando al Celta como vencedor en el trueque con Maxi Gómez.
El Valencia, más allá de Aspas o Mina, tiene el problema consigo mismo. Es un equipo que va partido a partido, pero no como filosofía de vida sino por ausencia de miras y de proyecto. Gracia ya ni disimula que le da lo mismo, lo mismo le da, continuar o no en un banquillo que para sí quisieran mil. Si hoy le gana al Celta y sigue, bien; si hoy pierde y decidieran echarle, también. Tal desidia es al menos lo que transmite cada vez que habla en sala de prensa. Así, con esa actitud del navarro y con Peter Lim que ni le ha llamado para conocerle (en ocho meses y confinado algún rato libre habrá tenido) ni quiere pagarle para que se vaya, la autogestión de los Gayà, Soler, Gabriel y Maxi dirá si hoy al Valencia le sale cara o cruz. Y a la espera de su inspiración, ahí está su gente, viéndose a tres puntos del descenso.
El Celta tampoco podrá contar con Blais. Le sustituirá Solari, que se estrenará así de titular tras sus dos asistencias en tres partidos saliendo desde el banquillo. Ver su rendimiento desde el inicio es uno de los alicientes de la tarde, como también lo es saber si Gracia acaba señalando o indultando a Gonçalo Guedes tras su paseo por Valdebebas.