Guidetti lleva al Celta hasta los dieciseisavos
Los vigueses cumplieron y el Ajax echó una mano
Lo que se preveía como una noche de infarto, al final no fue tal. El Celta consiguió el pasaporte para los dieciseisavos de final con un guión mucho más plácido de lo previsto. La trama fue más propia de Disney que de Hichtcook. La primera sonrisa aparecía, prácticamente, en la primera imagen. Guidetti remachó con la testa un milimétrico centro de Hugo Mallo a los cuatro minutos y a partir de ahí fue todo rodado. De hecho, los célticos ni siquiera necesitaron ofrecer su mejor versión. Apenas fueron exigidos para apretar el acelerador. Porque, además, las noticias provenientes desde Lieja eran inmejorables. El Ajax rebajó aún más las pulsaciones de los olívicos con su gol ante el Standard. Quizás conocedores de la situación, los de Berizzo se dedicaron a controlar el partido, sin mayores sobresaltos. Rubén Blanco apenas tuvo que intervenir y el paso de los minutos eran una auténtica bendición.
Pasaba el tiempo y no sucedía nada. Y eso beneficiaba al Celta, que se dedicó a esconder el balón y anestesiar a un Panathinaikos totalmente desmotivado. El tramo final se acercaba y el miedo a que sucediera algo inesperado estaba presente. Todo parecía controlado, pero en el fútbol el control se puede perder en un segundo. Sin embargo, Moledo eliminó todos los fantasmas al cometer un penalti tan absurdo como claro. Orellana selló el pase desde los once metros. El chileno, con una pasmosa tranquilidad, no perdonó la pena máxima. El Standard había conseguido empatar su partido en ese momento, pero ya no quedaba tiempo para más y nadie temía por la clasificación. Los vigueses estarán presentes en el sorteo del próximo lunes. Tienen licencia para soñar.
El Standard no consiguió ganar y los celestes nunca temieron por
el pase