La perla que se le escapó a España
■ Alex de Minaur, como figura su apellido en el cuadro de Australia, es en realidad Alex de Miñaur, con ñ. Eso porque su padre es uruguayo, su madre española, vive en Alicante... pero juega bajo bandera australiana. Con sólo 17 años y tras recibir una invitación del torneo (superó la fase previa en Brisbane y en Sydney derrotó a Benoit Paire), se situó ante los focos con su primera victoria en un Grand Slam: 5-7, 6-3, 2-6, 7-6 (2) y 6-1 sobre Gerald Melzer (87º y casi diez años mayor). En la grada, Lleyton Hewitt, el último gran tenista aussie, aconsejándole.
De Miñaur nació en Sydney y sus padres se trasladaron a Alicante cuando tenía cinco años. Allí comenzó a destacar y buscaron el apoyo de la Federación Española. No lo obtuvieron. Volvieron a las antípodas, donde regentaban un par de modestos negocios, y contaron su caso a la Federación Australiana. Todo fueron facilidades, con mucho dinero disponible desde las arcas del Abierto y con ansia por contar con un nuevo campeón.
“He vivido la mitad de mi vida aquí y la otra mitad en España. Australia siempre me ayudó mucho y estoy feliz de representarles”, contó en sala de prensa, en inglés y en español. No hay vuelta atrás. Una perla se escapó de las redes de la convulsa Federación Española y podría haber sido el relevo de Nadal, Ferrer y compañía.