El Getafe encontró la joya en el 93’ y de penalti
Puro espectáculo. Gol anulado a Ortuño en el 87’
De penalti y en el minuto 93. Así se resolvió un partido de Primera jugado por dos equipos de Segunda que bien pudo haberse resuelto de forma contraria, pues al Cádiz le anularon un gol en el 87’ por fuera de juego de Ortuño, una decisión milimétrica del árbitro que sólo puede quedar aclarada por la tecnología del ojo de halcón. En cualquier caso, el partido fue puro espectáculo.
De inicio fue mejor el Cádiz pero, piruetas del azar, el senegalés Sankaré resbaló cuando iba a interceptar un pase filtrado de Emi, el balón se coló entre sus piernas y, ya que se tiene mala suerte que lo sea del todo, el balón fue a caerle a Jorge Molina, el killer del Getafe, y gol.
Se sobrepuso el Cádiz de la mejor forma posible: casi inmediatamente y gracias al autor de la desgracia, el propio Sankaré, quien remató de cabeza (sin oposición de Mora) un córner que había sido generado tras un lejano y magnífico lanzamiento de falta de Oliván.
Fue cuando el partido entró en la dimensión real que de él se esperaba, un yo soy más que tú entre dos serios aspirantes al ascenso. En una de esas idas y venidas, el zurdo Emi armó su pierna derecha y clavó el balón con efecto junto al palo izquierdo. Golazo.
El partido era del Getafe por goles, pero por ocasiones no tenía dueño. En el 58’, Salvi aprovechó un error de Mora para plantarse solo ante Alberto. El portero le sacó el remate. Poco después, una falta por manos de Cata que bien pudo ser penalti la ejecutó Aketxe a la perfección. 2-2 con partido y emoción por delante.
El final fue un duelo de pistoleros entre los dos 9. Ortuño marcó en el 87’ pero se lo anularon, pero el partidazo todavía guardaba una sorpresa: el penalti de Cifuentes a Gorosito que Jorge Molina transformó en gol y victoria.